Esta decisión se hace “con el fin de facilitar las distintas intervenciones de la Policía en la lucha contra la inseguridad y hacer frente a la crisis agrícola y alimentaria en el país”.
Son 17 los municipios que han decretado la calamidad pública, mientras que otros 10 se encuentran en alerta roja.
Debido a los torrenciales aguaceros que se han registrado en las últimas semanas en el municipio, las pérdidas en cultivos son cuantiosas.
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