Para conocer la eficacia del Remdesivir contra la COVID-19 faltan evidencias: U. Nacional
Los estudios clínicos no demuestran que efectivamente reduce los tiempos de recuperación y la mortalidad en pacientes que han dado positivo al virus.
En días pasados, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) autorizó el uso de Remdesivir, un fármaco experimental, para tratar el coronavirus.
Sin embargo, los estudios clínicos no demuestran que efectivamente reduce los tiempos de recuperación y la mortalidad en pacientes que han dado positivo al virus. A esta conclusión llegó el análisis del Centro de Pensamiento Medicamentos, Información y Poder, de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL).
La aprobación hecha por la FDA de Estados Unidos, está fundamentada en dos estudios. Uno corresponde al Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) de EE.UU., que aún no ha sido publicado, y el otro se refiere a resultados que fueron publicados en la revista The Lancet. Este último no dio resultados significativos, aseguró la directora del Centro de Pensamiento, Claudia Vaca, perteneciente al Departamento de Farmacia de la UNAL.
“Aunque no fue estadísticamente significativo, los autores destacan un hallazgo clínico, dado que, en términos aritméticos, los pacientes que recibieron Remdesivir tuvieron un tiempo más corto de mejoría clínica que aquellos que recibieron placebo, una duración de los síntomas de 10 días o menos”, señala el Centro de Pensamiento sobre los aspectos positivos del estudio.
Sin embargo, también se reportaron eventos adversos en el 66 % de los receptores de Remdesivir y en el 64% de los receptores de placebo, por lo que se suspendió rapidamente en el 12 % de los pacientes, debido a dichos eventos adversos.
El segundo ensayo, el de la NIAID, es sobre el cual su director, Anthony Fauci, anunció resultados positivos el pasado 29 de abril desde la Casa Blanca con 1.063 pacientes participantes. Pero este estudio aún no ha sido publicado, de modo que no ha podido ser contrastado por la comunidad científica.
“Aunque existe una breve esperanza de que pudiera mejorar, lo que podemos concluir es que uno de los ensayos no está publicado y no conocemos los datos finales reales, y el de The Lancet no muestra resultados significativos. Tenemos un indicio, pero debemos tener paciencia y esperar a que se terminen estos estudios”, explica la docente Vaca.
Recordemos que el Remdesivir se desarrolló contra el ébola, aunque también mostró efecto contra SARS y MERS. Debido a que el SARS-CoV-2 causante de la COVID-19 se considera una variante del patógeno SARS de 2002, desde que empezó el brote en China, los investigadores centraron su atención en este medicamento, el séptimo con más estudios en marcha hasta esa fecha.
Y aunque Colombia forma parte, en conjunto con México y Brasil, de los países latinoamericanos que adelantan estudios sobre tratamientos para la COVID-19 con la Organización Mundial de Salud (OMS), hasta el momento estos no incluyen Remdesivir, porque aún no está disponible en esta parte del continente.