Mareo al viajar en avión: ¿por qué ocurre y cómo se evita?
Para un amplio grupo de personas, el viaje en avión puede convertirse en una verdadera pesadilla.
La perspectiva de viajar en avión para la mayoría de personas es una experiencia emocionante o algo tan simple como el hecho de trasladarse de un punto a otro del globo, con cierta incomodidad y poco sueño en muchos casos.
Sin embargo, para un amplio grupo de personas, el viaje en avión puede convertirse en una verdadera pesadilla por cuenta de síntomas como náuseas o mareos, especialmente durante las turbulencias molestas.
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¿Por qué da mareo al viajar en avión?
Este fenómeno se produce por una condición llamada cinetosis, que aparece cuando una persona viaja en carro, avión o barco y puede llegar a sentir una intensa sensación de mareo, que puede ir acompañada en mayor o menor medida con otros síntomas.
Esto se produce cuando el cerebro interpreta el movimiento a través de la información proporcionada por la vista, el oído interno (a través del llamado Laberinto, responsable del mantenimiento del equilibrio) y la propiocepción, que no es otra cosa que la capacidad del cerebro de reconocer la ubicación espacial en la que se encuentra el cuerpo, así como su posición y orientación, sin emplear la visión.
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Por eso, cuando la persona se encuentra viajando a gran velocidad, esta percepción dispar puede provocar no solamente mareo sino también fatiga, náuseas, vómito, sudor frío, dolor de cabeza y aumento de la salivación.
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¿Cómo evitar el mareo durante los viajes en avión?
Afortunadamente, para evitar o reducir estos efectos secundarios y arruinar la experiencia de viajar, existen varias alternativas. Sin embargo, tenga en cuenta que es fundamental que usted consulte primero con un médico si sufre de esta condición con frecuencia.
Según Sandra Lion para el diario La Vanguardia, los asientos más cercanos a la cabina del avión o los que están situados sobre las alas presentan mayor estabilidad. Sentarse en estos puestos puede ayudar a reducir el movimiento del cuerpo durante el vuelo.
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Así mismo, para ayudar a que el cerebro estabilice el equilibrio, se debe mirar a un punto fijo en la distancia. En la misma línea, no es aconsejable leer o jugar con videojuegos, ya que tener objetos cercanos a la cara y los ojos puede generar signos confusos de movimiento para el cerebro.
Respirar aire fresco, cuya corriente dirige hacia el rostro (ajustando la ventilación individual de cada asiento) permite relajarse y mantener el cuerpo a una temperatura moderada.
Además, horas antes del vuelo se debe reducir la ingesta de alimentos picantes, grasos, salados o pesados, así como evitar las bebidas alcohólicas o con cafeína. Tampoco es recomendable comer en grandes cantidades antes de abordar el avión. Si el problema es de malestar estomacal, las bebidas que contengan jengibre pueden ayudarle.