“Un año sin justicia”: familiares de Natalia y Rodrigo
La verdad de los hechos no está clara, la Fiscalía se mantiene en que todo se trató de un robo.
Ha pasado un año de la desaparición y posterior asesinato de la ambientalista Natalia Jiménez y de su esposo Rodrigo Monsalve, y más son las dudas que respuestas las que hoy tiene la familia de esta pareja, que salía de Santa Marta hacia Palomino a disfrutar de su luna de miel.
El 20 de diciembre de 2019 empezó el calvario para Ximena Cáceres, madre de Natalia, pues, no había rastros de su única hija lo cual le suponía pensar en una hipótesis que 3 días más tarde se confirmó.
Un agricultor dio aviso de la presencia de 2 cuerpos en zona cercanas a Perico Aguao, con signos de tortura, sevicia y tiros de gracia, eran Jiménez y Monsalve, a los cuales ni la muerte pudo separar. Su crimen causó conmoción en el país.
A pesar de las respuestas de la fuerza pública y la Fiscalía en la captura de Giovanni Ortiz Calderón, Jaider Groelfi Lozano, alias ‘el Negro’; Andrés Felipe Socarrás, alias ‘Pipe Bareta’; y Luis Rodríguez Tovar, alias ‘Luchito’, Ximena asegura que del doble homicidio hay verdades no contadas, y algunas inconclusas que no permiten el esclarecimiento de los hechos. Van 3 audiencias, los implicados no han sido condenados y uno de ellos no aceptó los cargos, y aún sigue un sujeto por capturar.
“Hemos tenido un diciembre muy amargo, se nos viene a la memoria lo que ocurrió hace un año, un proceso de injusticia, que me digan que los tienen en la cárcel, todo sigue igual. Las audiencias son aplazadas sin razones, ojalá que no estén esperando que se cumplan los términos para que esto desaparezca y no pasa nada", dice Cáceres.
“Me niego a creer que el móvil sea el hurto”
La Fiscalía, de acuerdo con la versión de los presuntos asesinos, el robo de la camioneta Ford negra con placas DAI 160, sería la principal razón del homicidio. Ximena pide que se evalúe el activismo ambiental de Natalia como móvil de los crímenes.
“Yo estoy pidiendo que se investigue el trabajo de mi hija, pero no lo han aceptado. En febrero se va a dar la audiencia condenatoria y el expediente se cerrará y el caso quedará como un hurto. En nuestros corazones sentimos que hubo otros móviles”, dijo la progenitora.
La presión mediática en la entrega de resultados
En su testimonio la madre de Natalia cree que la rapidez y eficacia con la que respondieron las autoridades durante la primera semana de los homicidios, obedeció a una presión mediática.
“Ellos no esperaban que se movilizaran las redes sociales como ocurrió. !Qué velocidad! Y ¿Para qué? No han hecho nada, no ha habido justicia. ¡A nadie le interesa, porque se trata de un muerto más, todos los días matan y todo queda allí!”, continuó.
Ximena señala que su hija y su yerno nunca le comentaron que tuvieran alguna amenaza, es más, indica que para las víctimas la Tronca del Caribe nunca representó una amenaza para el desarrollo de sus actividades. Sin embargo, algunas versiones extraoficiales ligarían a Rodrigo con el tráfico local de drogas, cargo que no ha sido probado.
Para esta madre angustiada, solo habrá justicia cuando se agoten todas las aristas de los hechos y se condenen a los presuntos asesinos.
La Fiscalía le respondió a la W que hasta que no sea proferido el fallo condenatorio, no se pronunciarán sobre el crimen de la ambientalista y el DJ.