Tumaco entre el conflicto y el COVID

El inicio del 2021 para el Puerto sobre el pacífico de Nariño, genera mucha incertidumbre, los hechos de violencia y la salud de los habitantes pone en entredicho las acciones de las autoridades

El municipio de Tumaco durante los últimos años ha buscado adelantar varias estrategias para recuperar la seguridad, fortalecer los sectores productivos y promocionar sus playas como destino turístico del país, pero la complicada situación por el recrudecimiento del conflicto armado y la disputa de los territorios por el control del narcotráfico solo generan muerte, dolor y desconcierto entre sus habitantes.

Nariño registra según cifras de Medicina Legal 364 homicidios durante el año 2020, tan solo una disminución del 1% con relación al año 2019, ni la pandemia logró minimizar las afectaciones de las confrontaciones, sicariatos, ajustes de cuentas y hechos de intolerancia entre la población.

Del total de muertes violentas en el departamento, Tumaco registra 193, un 53% del total de homicidios durante este periodo, un 11% menos que en el 2019, uno de los años más violentos en el municipio costero.

Ciudades como Pasto registra un aumento en homicidios del 11%, Ipiales un 45% y Samaniego con la masacre de los jóvenes universitarios un 1.100%, ya que en el 2019 solo se registró una muerte violenta.

La situación de los líderes sociales en Nariño no fue la mejor, durante el año anterior, según el director de Fundepaz Jesús Arciniegas, se presentaron 30 asesinatos, en su gran mayoría líderes y lideresas integrantes de las comunidades indígenas, en especial Awá, entre los municipios de Tumaco (53%) y Barbacoas (17%) se registra la muerte de 20 representantes de los territorios étnicos.

Indepaz asegura en su informe 2020, que en Nariño fueron asesinados 35 líderes sociales, al incluir varios ciudadanos con filiaciones políticas o de representación comunal entre la población

En Tumaco hacen presencia según informes extraoficiales de inteligencia, 18 grupos armados ilegales que se disputan el territorio del narcotráfico, con más de 800 hombres armados que generan múltiples hechos de violencia, además de desplazamientos y confinamientos. A el ELN, las Guerrillas Unidas del Pacífico, el Frente Oliver Sinisterra, Los Contadores, el Clan del Golfo se unen ahora la Nueva Marquetalia, el Bloque Occidental Alfonso Cano entre otros.

Para el diputado de Nariño Heriberto Campáz, es inconcebible que, con la alta presencia de fuerza pública, en Tumaco y varios municipios de la costa pacífica se sigan presentando los más brutales asesinatos y desapariciones, como la registrada el pasado 10 de enero con 11 personas que salieron desde el Puerto con destino a Mosquera, sin que a la fecha se conozca el paradero o suerte de los ciudadanos, una denuncia en la Fiscalía es el único avance para las familias de los desaparecidos. 

Asesinatos en zonas urbanas y rurales no se registran en los datos oficiales y un sin número de hechos violentos quedan en las estadísticas de la fuerza pública y medicina legal. Las autoridades civiles de Tumaco no asisten a consejos de seguridad, tampoco entregan información o asistencia a la ciudadanía afectada por el conflicto armado.

La pandemia…

En la gran mayoría de los municipios de Nariño se bajó la guardia en cuanto a las afectaciones del COVID-19, en la actualidad afronta su segundo pico de contagios con mayores y preocupantes cifras, con relación a las presentadas en los meses de julio y agosto de 2020.

Las festividades de navidad, fin de año y carnavales tienen colapsado el sistema de salud y el departamento en alerta roja hospitalaria con una ocupación de camas UCI por encima del 98%, ante esta situación, el Instituto Departamental de Salud de Nariño (IDSN), determinó intervenir el sistema y redistribuir los pacientes entre las poblaciones de Pasto, Ipiales, Tumaco y Túquerres según la necesidad diaria.

El Gobernación a través de la Gerencia COVID y el IDSN empezó a solicitar al Ministerio de Salud, la remisión de pacientes a otras ciudades del país, entre ellas Cartagena y Barranquilla, pero la negativa de familiares ha impedido la salida de personas.

El desorden social hoy tiene a Pasto en el máximo estado de alerta, además porque recibe pacientes de todos los municipios, en el caso de Tumaco, el diputado Campáz asegura que podría presentarse una emergencia en los próximos días por los casos de recontagios, personas que ya pasaron por la afectación del virus y que hoy presentan un nuevo cuadro de infección.

Para el integrante de la Asamblea de Nariño, esto se debe a la alta presencia de ciudadanos que llegaron en los primeros días de enero, escapando del encierro y las medidas de aislamiento obligatorio de otras regiones del departamento y el país, las playas y sitios turísticos estaban a su máxima capacidad sin medidas de bioseguridad adecuadas y escaso control de las autoridades locales, las fiestas y encuentros sociales se presentaban a diario en el Puerto.

Diego Ángulo reconocido líder social y político hizo un llamado a las autoridades nacionales y regionales para que se asista a la ciudadanía, se realice pruebas a la población y se determine medidas especiales hasta que empiece la vacunación en el país, las afectaciones estarían por venir en una segunda etapa de contagios y el sistema de salud de Tumaco es el más vulnerable de todo el departamento de Nariño.

En el caso de Pasto, la Secretaría de Salud confirma que se destinan 165 camas UCI para pacientes COVID con una ocupación de 155 en promedio durante la última semana, 86 pacientes son de la capital, el total de unidades de cuidados intensivos de la ciudad es de 249, que indica una ocupación total cercana al 90% incluyendo otras patologías.