Escenario deportivo se cae a pedazos sin aún haber sido entregado en Santa Marta

La inconformidad de los habitantes de Gaira, sur de Santa Marta, motivó a que el Coliseo construido durante la administración de Rafael Martínez como alcalde de la ciudad, fuera revisado nuevamente por el Concejo distrital, porque además de no haber sido entregado en su totalidad y no estar disponible para la utilización de los deportistas, esta obra se cae a pedazos.

El escenario construido para los Juegos Bolivarianos de 2017 inició costando $2.684 millones de pesos, y durante su ejecución sufrió adiciones de hasta $1.338 millones, y aun así, en un informe los concejales concluyen que no se utilizaron los materiales adecuados para el piso y la cubierta, entre otros detalles.

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“Los cuatro muros de cerramiento presentan fallas estructurales, debido a que las vigas de amarre no fueron proyectadas hacia la constitución de la cancha, conllevando a que cedan por el peso de las paredes laterales, agrietando y debilitando el inmueble”, establece la inspección.

La preocupación de los cabildantes está ligada a un anuncio que hizo la alcaldesa Virna Johnson, quien dijo que por garantía el contratista debía asumir los desperfectos que presenta el lugar, pero "dicha póliza de estabilidad solo permitirá 'maquillar' el escenario".

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“Estamos preocupados porque la póliza de estabilidad de la obra es apenas de $280 millones de pesos, un valor muy inferior del que se va a necesitar para que el coliseo quede en óptimas condiciones”, manifestó el concejal David Palacio.       

Recientemente los gaireros adelantaron una protesta en la que con gaseosa, globos y pastel, conmemoraron un aniversario más de estar sin cancha y sin el centro de salud.