En Ituango, ofrecerían $15 millones a desmovilizados AUC por volver a ser reclutados
Las comunidades campesinas están incomunicadas y atemorizadas por las amenazas que imponen los paramilitares, AGC y disidencias de las Farc por control territorial.
Las veredas que conforman el Cañón de Santa Lucía en Ituango, en el departamento de Antioquia, están siendo abandonadas por sus habitantes ante la amenaza de muerte por parte de grupos armados ilegales que exigen su desplazamiento.
Hasta la fecha, cerca de 300 personas se encuentran sin un refugio para pasar la noche después de haber abandonado las veredas Quebrada Del Medio, Santa Bárbara, El Chuzcal, El Alto del Limón, entre otras. Además, en las últimas horas fueron desplazados los habitantes de la vereda El Quindío.
De esta manera, las comunidades campesinas no solo se encuentran incomunicadas sino atemorizadas por las amenazas que imponen los paramilitares, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) y las disidencias de las Farc, que disputan el territorio.
La Unidad de Víctimas alertó que 257 personas (101 familias) han arribado al municipio de Ituango (Antioquia) debido a intimidaciones y combates entre grupos armados criminales como el Clan del Golfo o las disidencias de las Farc. Así las cosas, desde el pasado 14 de febrero se activó el plan de contingencia y los afectados se encuentran albergados.
Sigue La W conversó con Isabel Zuleta, líder social de la Fundación Ríos Vivos, quien relató cómo se vive la grave crisis de orden público en esta zona del país: "Hay más de cien familias desplazadas de Ituango, no están concentradas en un solo sitio. Lo más preocupante es que gran parte del municipio está confinado".
Además, denuncia la falta de apoyo por parte del Gobierno: "Esto no se puede controlar solo con el Ejército (...) no hemos contado con la atención del Gobierno local, departamental y nacional. Se necesita de una actuación interinstitucional. Hemos suplicado al gobernador de Antioquia que nos escuche, que se reúna con los líderes, porque esto se veía venir".
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Zuleta también advirtió que varios desmovilizados de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) han recibido llamadas en las que les ofrecen dinero para volver a integrar grupos paramilitares: "Les ofrecieron 15 millones de pesos por volver (...) mensualmente les pagan 1'100.000 por hacer parte del grupo armado", relató.
Por su parte, el brigadier general Juvenal Díaz, comandante de la Séptima Brigada del Ejército, habló sobre las acciones adelantadas en la zona: "Hemos ofrecido la presencia militar y se han generado ayudas para que las familias retornen a sus parcelas. Tenemos la capacidad, los hombres y la estrategia para combatir este flagelo. Uno de nuestros propósitos es librar de cultivos ilícitos esta zona, pues son la raíz de sus problemas".
El uniformado desmintió que se trate de la reintegración de antiguas estructuras criminales que operaban en Antioquia: "En Ituango estaban los frentes 36 y 18 de las extintas Farc (...) el Clan del Golfo quiso retomar estos territorios. Eran grupos ya conformados".
Sigue La W también conversó con Pablo*, quien es víctima del conflicto armado en esta zona: "Ituango es un punto estratégico para los grupos armados. Es difícil controlar el corredor (...) hay una disputa territorial, todo el mundo lo sabe".
A propósito, en Sigue La W, el secretario regional y sectorial de Seguridad Humana de la Gobernación de Antioquia, Luis Fernando Suárez, se refirió a la problemática por enfrentamientos entre bandas criminales en Ituango.
“Estamos en un Consejo de Seguridad para atender la situación tras los enfrentamientos entre miembros del Clan del Golfo y de los Grupos Armados Organizados de las Farc”, dijo.
“Tenemos presencia del ELN, del Clan del Golfo y de las disidencias de las Farc. Nuestro foco es generar las condiciones de seguridad en este municipio de Antioquia.”, agregó.