El COVID-19 ha acabado con la vida de ocho personas de una misma familia en Santa Marta
El cuerpo del último de los fallecidos tardó 32 horas para ser sepultado.
Jaime Alberto Sánchez Martínez narra que, en este año de contagios y emergencia ha perdido a 8 familiares por causa del COVID-19. Foto: Juan Tapia(Thot)
Jaime Alberto Sánchez Martínez narra que, en este año de contagios y emergencia ha perdido a 8 familiares por causa del COVID-19. En el primer golpe tuvo que despedir, entre julio y agosto, a 5 seres queridos: a su abuela, de 100 años; 2 tíos y otros 2 parientes más.
Esta tragedia conmocionó a Santa Marta y a su vez suscitó una discusión sanitaria y administrativa, pues, la Secretaría de Salud distrital negó que existiera una evasión de responsabilidades en el caso y señaló que la Sala de Análisis del Riesgo no recibió un reporte sobre estas urgencias.
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Sin embargo, la muerte continuó tocando a su puerta, entre enero y abril, han fallecido 3 personas más, el último de ellos fue su hermano Leonardo de 44 años, cuyo cadáver permaneció 32 horas en su vivienda esperando la asistencia funeral.
“Son 8 familiares que dolorosamente se han ido por este virus que no hace distinción de nada. Mi hermano no quiso ir a la clínica porque como nuestros parientes fueron intubados y luego fallecieron, eso le daba miedo. Prefería morir en su casa”, explicó Sánchez.
Jaime dice que teme por el futuro de los suyos, además le preocupa la estigmatización que enfrentan por las sucesivas muertes por coronavirus, siente que, para algunos de sus vecinos, esta es una enfermedad infecciosa con alguna connotación social como en siglos pasados.
La experiencia de los Sánchez Martínez ha sido compartida por 997 familias que conciben esta situación como una pesadilla que no se sabe hasta cuándo ira.
Acorde con la preocupación de los samarios, el concejal y médico Álvaro Linero, encendió las alertas en el sistema sanitario sobre una escases de camas UCI pediátricas, ya que los niños y jóvenes son el nuevo objetivo del cambiante virus.
Según las últimas cifras del INS, la ciudad suma 35.686 casos en total, mientras que la vacunación avanza a pasos lentos, con un 78.5% en la cobertura de cumplimiento. Los mayores de 60 años, población que en su mayoría hizo parte de los fallecidos en el reporte de este miércoles, están por recibir los biológicos.
