El Bullerengue en Casa, la nueva apuesta de un festival en Puerto Escondido
Se trata del Festival Nacional del Bullerengue, que celebra su versión número 33 en medio de la cuarentena.
La cuarentena se convirtió en la excusa perfecta para que en el municipio de Puerto Escondido (Córdoba), se identificaran aún más con el Festival Nacional del Bullerengue, pues en su versión número 33, se motivó a los porteños para que transformaran sus hogares en pequeños espacios llenos de color, una expresión auténtica de esta actividad.
"Iniciamos un concurso de la casa mejor vestida con motivos bullarengueros, esto ha sido un fenómeno cultural, la gente ha sacado a flote su creatividad, ha dado lo mejor de sí. Hay más de 20 casas en la cabecera municipal y en el corregimiento de Cristo Rey, donde el bullerengue tiene mucha influencia, y han adornado sus viviendas con las faldas, con los tambores, afiches y con todos los elementos costumbristas, algunos tienen pesebres bullarengueros en vivo", sostuvo el fundador del Festival del Bullerengue, Aroldo Álvarez.
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Así mismo destaca que "estaremos premiando los tres primeros lugares, aunque con lo que se ha visto todas las casas merecen un premio, pero desafortunadamente los recursos no nos alcanzan sino para premiar los tres primeros lugares, que no serán escogidos por un jurado común y corriente, sino que dependerá de las interacciones que se conozcan en redes sociales, a través de nuestra página Asocultura en Facebook".
Al ritmo de bullerengue, en Puerto Escondido, se rinde un homenaje a la cultura afrocaribeña y se pretende mostrar la riqueza de este municipio costanero que no solo ofrece playa, brisa, sol y mar, sino también la calidez humana reflejada en la buena gastronomía.
Los gestores culturales de esta zona, definen el bullerengue como un baile cantado, que motiva a quienes lo practican, a lucir un particular vestuario que tiene significado propio como lo describe Rois Ávila.
"Bailan totalmente descalzos, el hombre utiliza un sombrero, mientras que la mujer tiene su cabeza adornada con flores y un turbante. El vestuario es el aporte del español en épocas de colonización, los instrumentos son el aporte del indio y el baile y el canto, es el aporte que hace el negro al bullerengue, es una mezcla triétnica", agrega Ávila.
Por otra parte, la nueva versión del Festival del Bullerengue, deja un mensaje claro que según Shirly Cantero, seguirá de generación en generación.
"Algo diferente que nos ha hecho vivir esta pandemia, es que no adornábamos nuestras casas con esos instrumentos, con esos vestuarios, con ese colorido, no le dábamos alegría a las casas para mostrar lo que es nuestro festival, pienso que va a quedar así para todos los años porque si Dios lo permite en 2021 estaremos viviendo nuestro festival presencial y con las casas decoradas", resalta Cantero.
El Festival del Bullerengue, inició el pasado 22 de junio y finaliza el 25 de este mismo mes con un concurso virtual de cantadores.
Con este tipo de iniciativas que además presentaron jornadas académicas, el municipio de Puerto pasa a ser un verdadero tesoro Escondido, que solo disfrutan quienes tienen la oportunidad de encontrarlo y se suman al sentir de más de 30 mil habitantes que luchan por mantener viva la cultura aún en tiempos difíciles.
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