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Caicedo acepta demoras y pagos adicionales a contratistas de la Megabiblioteca

La obra, avaluada en $16 mil millones de pesos, fue iniciada en 2015 cuando el hoy gobernador del Magdalena era alcalde de Santa Marta.

En un recorrido por las denominadas ‘obras del cambio’, Carlos Caicedo, gobernador del Magdalena, y Virna Johnson, alcaldesa de Santa Marta, llegaron a la Megabiblioteca, un proyecto académico con moderno diseño contratado en 2 fases, con valores de $10.044 millones y $6.988 millones de pesos, respectivamente.

La etapa I, ejecutada por el consorcio ‘Mega Instituciones’, debía ser entregada en mayo de 2015, mientras que la etapa II, contratada el 24 de agosto de 2015, tenía plazo de 120 días, lo que indicaba que a principio de 2016 la ciudad estrenaría un nuevo complejo académico, pero no fue así.

Han pasado 6 años desde la colocación de la primera piedra y aún no entra en funcionamiento el lugar. A la Fase I, por ejemplo, durante este tiempo recibió en 9 adiciones cerca de $6.547 millones más 3 suspensiones y 8 prórrogas. Por su parte, a la fase II le fueron adicionados $3.493 millones.

Sumado al tema de la construcción de la infraestructura, también se dio la contratación de mobiliarios, libros, equipos de tecnología y el sistema de aires acondicionados, todos estos en contratos diferentes por valor total de $2.565 millones de pesos.

La respuesta del gobernador

En la visita a la cuestionada obra, el mandatario departamental reconoció que en los 6 años de atrasos hubo pagos adicionales a los contratistas sin que significaran nuevas obras. Asimismo admitió que no está lista para ser entregada y fecha para la inauguración aún no hay. Falta que lleguen las sillas y la acústica del auditorio, dado que el fabricante ha tenido inconvenientes.

La dotación de esta biblioteca no estaba calculada en los contratos que inicialmente se hicieron, entonces hay que agregarle contratos adicionales con el tema del amoblamiento”, dijo Caicedo Omar.

Y agregó, “en la ejecución de las obras, el contratista plantea que los precios que inicialmente se pactaron son desfavorables, porque en el mercado estaban por debajo de la media, entonces, el reajuste de precios implica un adicional y parecieran  un costo agregado pero es un ajuste de valores que tiene que ver con los precios del mercado o con las prórrogas que se hacen en tiempo y la afectación en el desequilibrio contractual”.    

El gobernador insistió que parte de la demora de la terminación de la obra se centró en la discusión con el diseñador de la megabiblioteca, quien insistió que tenía que ser concreto verde a la vista, el cual no es común en las cementeras.

En las mesas de seguimiento al proyecto, de la cual hace parte la Contraloría se acordó una primera fecha de entrega el 15 de febrero de este año, pero no se cumplió y en un nuevo plazo para 19 de abril, tampoco se dio la culminación.  

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