Así delinquen en Boyacá extorsionistas que se hacen pasar por el ELN
Desde las cárceles hacen exigencias económicas a comerciantes, agricultores, amas de casa y transportadores de carga. Un hombre cobra las extorsiones en terreno.
Las autoridades lograron capturar a un hombre de 38 años de edad, oriundo de Córdoba y que reside en Soacha, Cundinamarca. . Foto: Getty Images(Thot)
El Gaula de la Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía Segunda Especializada y mediante orden judicial establecieron la forma en que extorsionistas desde las cárceles de varias zonas del país con apoyo de un hombre de 38 años de edad realizaban exigencias económicas a comerciantes, agricultores, amas de casa y transportadores de carga.
Luego de 8 meses de investigación con agentes encubiertos, interceptación de llamadas telefónicas, seguimientos y recolección de información mediante fuentes humanas, se determinó que Alias Oscar de 38 años de edad, natural del departamento de Córdoba y residente en el municipio de Soacha Cundinamarca, se encargaba de cobrar las extorsiones e intimidar a sus víctimas haciéndose pasar como integrante del ELN.
Alias “Óscar” fue capturado por el delito de extorsión en el municipio de Soacha y es reincidente en el delito, toda vez que presenta antecedentes por hurto calificado y agravado, lesiones personales y extorsión en otros departamentos, quien ejerce su actividad delincuencial, valiéndose de la modalidad de extorsión carcelaria “falso servicio”.
Según el comandante de la Policía Metropolitana de Tunja, coronel Henry Yesid Bello, se estableció que era el encargado de recolectar datos de las víctimas para delincuentes dentro de centros penitenciarios.
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Según el coronel Cubides el Modus operandi de alias Óscar era tomar contacto con las empresas de transporte, solicitando servicio de mudanzas, carga y grúas hacia zonas rurales ofreciendo grandes cantidades de dinero, por lo cual se ganaba la confianza de los conductores, los cuales emprendían sus viajes a sectores rurales apartados de la región, donde el conductor recibía una llamada de supuestos integrantes del ELN.
“A través de intimidación exigían detener el vehículo y posteriormente exigir a la empresa una suma de dinero que oscila entre $200 mil a $20 millones de lo contrario atentarían contra la vida del conductor e incinerarían el vehículo”, dijo el coronel.
