Agente especial solicitó intervención de la Contraloría General en el hospital de Montería
La petición se habría fundamentado en supuestas faltas de garantías en un informe presentado por la Contraloría de Córdoba, donde se advierte de hallazgos por más $4.000 millones.
A través de un comunicado de prensa emitido por parte de las directivas del hospital San Jerónimo de Montería, se estableció que el agente especial interventor Rubén Darío Trejos, habría alertado a la Contraloría General de la República, por falta garantías e imparcialidad en la auditoría integral que se realizó en julio de 2020, por parte de la Contraloría de Córdoba, que advirtió sobre hallazgos fiscales por más 4.000 millones de pesos.
“La ESE solicitó al Contralora Delegada para el Sector Salud, Lina María Aldana una intervención funcional, por considerar vulnerados los derechos a la defensa, contradicción y al debido proceso”, se advierte en el comunicado.
De acuerdo con lo establecido, Trejos Castrillón, habría fundamentado su solicitud en los siguientes puntos:
“La Contraloría Departamental no valoró los 141 folios y 4.875 anexos presentados como material probatorio por la intervención, y en tiempo récord dejaron en firme 51 hallazgos de los 53 planteados inicialmente, de los cuales: 44 tienen incidencia disciplinaria, 1 penal, 1 de carácter sancionatorio y 19 más por presunta incidencia fiscal”, se informa en el comunicado.
Además, manifestaron que “el ente de control nunca se acercó a la institución hospitalaria a hacer consultas, practicar pruebas o pedir aclaraciones con cada uno de los líderes de los procesos auditados, lo que no permitió aclarar, como es debido, algunas situaciones que se constituyeron en hallazgos”.
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“Desde el inicio del proceso de auditoría, la Contraloría de Córdoba, ha transgredido el principio de reserva legal, al realizar comentarios sobre el proceso en medios de comunicación regionales, situación que evidencia los vicios y la falta de objetividad del proceso”, se anota en la solicitud formulada.
Asimismo, sostuvieron que no se habría realizado un auto de cierre y/o acta por parte del ente de control, la cual según lo planteado, debió ser socializada y firmada por las partes.
Teniendo en cuenta lo expuesto, el agente interventor del hospital San Jerónimo de Montería, Rubén Darío Trejos, dijo que “hacemos un llamado al doctor Carlos Felipe Córdoba, para que analice nuestros argumentos de manera positiva y así poder tener la certeza que esta auditoría se realice con plenas garantías”.
Frente a los cuestionamientos realizados, por parte de la Contraloría de Córdoba, se informó que “se respetaron todas las garantías, pues se les comunicó el informe preliminar con las observaciones. Posteriormente, se les dio cinco días para la controversia y la defensa; no obstante, se les autorizó una prórroga en tiempo para que ellos lograran controvertir y hacer los respectivos descargos en los que no habrían podido justificar lo que se encontró”.
“Una vez estudiada su defensa el grupo de siete auditores produjeron el informe final con los hallazgos. No se ha violado el debido proceso, tendrán la oportunidad de defenderse en el juicio de responsabilidad fiscal”, se agregó por parte del ente de control departamental.