Este 16 de agosto, el Consejo de Seguridad de la ONU celebra una reunión de urgencia para tratar la crisis de Afganistán, cuya capital, Kabul, fue tomada por los talibanes después de meses de avances y tras la retirada final de las tropas de Estados Unidos y la OTAN del país en mayo pasado. Para comprender el panorama de esta compleja situación que se vive en Afganistán, W Radio conversó con Khalid Amiri, periodista y activista afgano que ha defendido los derechos de la juventud en su país, especialmente la democracia y los derechos de las mujeres, así como el derecho de las niñas a la educación. Además, trabajó con RTA (Radio Televisión de Afganistán), el canal de televisión estatal. "En este momento, los afganos tienen miedo porque los talibanes ya han llegado (...) creemos que el futuro es muy oscuro para todos, incluyendo mujeres, periodistas, escritores y más", expresó el periodista en los micrófonos de La W. Así mismo, se refirió a su temor personal por su futuro y el de su familia en medio de la coyuntura: "No puedo controlar mis emociones porque no sé qué futuro me espera, no sé si conservaré mi empleo. Constantemente me amenazan porque he escrito artículos en contra de los talibanes. Ayer revisé mi celular con la esperanza de que todo esto sea una pesadilla. Siento mucho dolor hacia Estados Unidos, nos ha traicionado". Recientemente, Amiri escribió una sentida carta en la que solicita ayuda para salir del país porque su vida y la de su familia está en peligro: Le escribo esta carta con la esperanza de que mi súplica de ayuda llegue a usted antes de que mi cuerpo se enfríe. Afganistán está al borde de una catástrofe humanitaria. El estado está sumido en un caos total. Cada día, el conflicto está cobrando un precio mayor a la población civil, especialmente a las mujeres y los niños. Los talibanes se han apoderado de todo Afganistán y el ataque ha dejado a los ciudadanos petrificados. Los medios de comunicación y la sociedad civil, en particular, están en grave peligro ya que sus vidas y trabajos están en juego. Soy Khalid Amiri, periodista y activista social de Kabul. Trabajé en la televisión estatal RTA como productor senior y a cargo de la sección de medios digitales durante los últimos dos años y medio. Mi trabajo siempre fue por la construcción de la paz en la región, pero ahora estoy atrapado en mi casa recibiendo amenazas de muerte de los talibanes en llamadas telefónicas y en línea. Más de 50 periodistas han sido asesinados a sangre fría en los últimos dos meses y los talibanes los señalan como aliados del gobierno y los masacran en las calles. Mientras los talibanes continúan apoderándose del resto de Afganistán, las vidas de los ciudadanos están bajo una amenaza constante. Muchos ya han huido del país. No nos queda otra opción que huir y llegar a un lugar más seguro. Serví al gobierno y sus aliados a costa de mi propia seguridad personal, hecho que me convierte en un enemigo directo a los ojos de los talibanes. Las autoridades les han dado la espalda a activistas sociales como yo. Por lo tanto, por motivos humanitarios, le ruego a su embajada que me proporcione asilo o un asentamiento temporal de refugiados en su país. Estamos indefensos y destinados a la persecución bajo el régimen talibán y usted es nuestra última esperanza agonizante.