Me queda satisfacción y agradecimiento: Caterine Ibargüen despide a los Olímpicos
La colombiana quedó eliminada en la final del salto triple y obtiene diploma olímpico.
La deportista antioqueña Caterine Ibargüen llegó a Tokio 2020 con una marca del año muy alejada de sus mejores saltos (13,86) y relegada al puesto 57 de la lista mundial, tras una temporada de recuperación de sus lesiones.
En la final del triple salto, Ibargüen se enfrentó contra la venezolana Yulimar Rojas, subcampeona olímpica en Río 2016, y con la española Ana Peleteiro, que accedió a la final de Tokio con un salto de 14,62 metros.
Sin embargo, la atleta de 37 años no logró superar la primera ronda de la final y, de esta manera, se despidió de este certamen.
En W Fin de Semana, la deportista expresó que se encuentra satisfecha del trabajo realizado: "Estoy muy contenta, lo que me queda es satisfacción y agradecimiento con Dios todopoderoso por la oportunidad de estar aquí y portar los colores, de significar una esperanza y una unión para el país".
Por su parte, la venezolana y doble campeona mundial de triple salto conquistó su primer oro olímpico con un nuevo récord del mundo, 15,67 metros en su último intento, y Ana Peleteiro, su compañera de entrenamientos bajo la dirección del cubano Iván Pedroso, ganó el bronce después de batir dos veces su récord de España.
El registro de Rojas mejora en 17 centímetros la plusmarca mundial establecida por la ucraniana Inessa Kravets el 10 de agosto de 1995 en los Mundiales de Gotemburgo (Suecia).
La portuguesa Patricia Mamona, con 15,01 en su cuarto salto, se alzó con la presea de plata y Peleteiro, batiendo su récord nacional primero con 14,77 en el segundo turno y luego con 14,87 en el quinto, se fue con el bronce.