De la negación a la resignación, el fútbol europeo reacciona al coronavirus
Negación, retraso en la toma de decisiones y finalmente aceptación son las etapas por las que ha pasado el fútbol eruopeo.
Negación, retraso en la toma de decisiones y finalmente aceptación. Frente al coronavirus, los dirigentes del fútbol europeo han preferido durante mucho tiempo "no pensar en el peor de los escenarios" ni "sobreactuar", antes de verse obligados a tomar medidas a la altura de la crisis sanitaria.
A pesar de la emergencia que supuso la explosión de la enfermedad en diciembre en China y después el confinamiento de la ciudad de Wuhan (11 millones de habitantes) desde enero, la temporada europea siguió su curso normal en este arranque de 2020.
Todo cambió a finales de febrero, cuando se declaró la cuarentena en varias comunidades del norte de Italia.
El 29 de febrero el esperado derbi de Italia entre la Juventus y el Inter, los dos en la pelea por el Scudetto, que tenía que disputarse un día después, fue declarado a puerta cerrada y finalmente aplazado a mediados de mayo debido a la progresión del virus.
En aquel momento la decisión no fue muy bien recibida. Diciendo que "como ciudadano" tenía "un gran respeto" por la medida, el administrador delegado del Inter Giuseppe Marotta se mostró "muy preocupado" por un calendario "ya muy cargado".
"Todo ha podido gestionarse mejor", añadió.
'Hemos hecho mucho'
Los temores a un aplazamiento de la Eurocopa 2020, prevista del 12 de junio al 12 de julio en 12 ciudades del continente, comienzan a instalarse.
Pero la UEFA responde con rotundidad. "El comienzo de la Euro será el 12 de junio de 2020 en Roma", señaló a principios de marzo.
Su presidente Aleksander Ceferin aseguró el 3 de marzo: "Tenemos confianza, pensamos que podemos gestionar bien el dosier, intentamos no ponernos en el peor de los escenarios".
El secretario general de la UEFA, Theodore Theodoridis, pidió "no sobreactuar".
"El calendario está cargado, cada aplazamiento puede ser problemático", explicó, poniendo en el armario "las hipótesis sin fundamento" relativas a una Eurocopa con cambios.
"Anular los partidos es aumentar el pánico", dijo el presidente de la Federación Francesa, Noël Le Graët.
Tres días más tarde, cuando la epidemia superó la barrera de los 100.000 casos confirmados en el mundo, la Ligue 1 decide aplazar el partido Estrasburgo-París SG debido a la propagación del coronavirus.
Presiones en Italia
El 11 de marzo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) califica el covid-19 de "pandemia", con más de 110.000 personas infectadas en el mundo.
"Anticipar todos los escenarios catastróficos", dice entonces la presidenta de la liga francesa Nathalie Boy para explicar la decisión de organizar todos los partidos del campeonato hasta el 15 de abril a puerta cerrada.
Italia y España, los dos países europeos más afectados por el coronavirus fueron los primeros de los cinco grandes campeonatos en decretar la suspensión de la competición.
Tras algunos jornadas de duda, el viernes les siguieron Francia y Alemania, que en un primer momento habían decidido seguir a puerta cerrada, e Inglaterra, tras los positivos del entrenador del Arsenal Mikel Arteta y del internacional inglés del Chelsea Callum Hudson-Odoi.
Ese mismo 13 de marzo la UEFA decide suspender todos los partidos de la Liga de Campeones y de la Liga Europa de la próxima semana.
La medida implica los partidos de vuelta de los últimos cuatro duelos de octavos de la Liga de Campeones, martes y miércoles, y la vuelta de octavos de la Europa League, el jueves.
La Europa futbolística se paraliza. Y la UEFA deberá tomar decisiones de calado el martes en su reunión de crisis.
En Italia saltó la polémica el domingo cuando los médicos de los clubes pidieron "por unanimidad" que no se reanuden los entrenamientos, después de que algunos clubes tomaran iniciativas para regresar a la actividad física.
"Estamos tristes e indignados de ver incluso hoy a algunos clubes comportándose en contra de los anuncios nacionales e internacionales, llamando a los jugadores para entrenar en pequeños grupos o peor para tomar cada día la temperatura", añadió la Asociación Italiana de Futbolistas (AIC).
"Vamos a proponer el aplazamiento de la organización de la Eurocopa", declaró el presidente de la Federación Italiana Gabriele Gravina el domingo.
La pelota está sobre la mesa de la UEFA. Debe decidir. Y pronto.