Los jugosos contratos que entrega el defensor Carlos Camargo a sus amigos

Sigue La W conoció más contratos que el defensor del pueblo, Carlos Camargo, ha entregado durante su administración a políticos y exmiembros de la rama judicial, que podrían ser sus amigos o conocidos, y que, en varios casos, aunque no cuentan con la experiencia para los cargos o los servicios que prestarán, son por altas sumas de dinero. Esto, en plena situación de crisis económica por la que atraviesa el país.

En la nueva lista de contratistas de la entidad aparecen nombres como los de Juan Carlos Galindo Vacha, a quien recordamos por haber sido Registrador Nacional. Galindo tiene desde diciembre de 2020, cuando ya estaba Camargo en la Defensoría, un contrato que fue renovado este año, por $160 millones para asesorar a la Defensoría Delegada para Asuntos Constitucionales y Legales.  

También está la exvicefiscal general de la Nación, María Paulina Riveros, quien cuenta con un contrato por prestación de servicios, firmado el pasado 12 de mayo y con un plazo de ejecución hasta el 31 de diciembre de este año, por $74 millones para coadyuvar a la delegada para la Infancia, la Juventud y el Adulto Mayor en la elaboración de un producto, que según le contaron fuentes a la W, lo podrian perfectamente hacer las personas del equipo de planta provisional. 

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Justamente la defensora delegada para los derechos de la infancia, la juventud y el adulto mayor, es Gissela Arias Gonzáles. Ella no es contratista, es una funcionaria nombrada, pero, para extrabajadores de la entidad que hablaron con la W, no cuenta con la suficiente experiencia para ocupar un cargo directivo de ese nivel que tiene una asignación salarial de más de $20 millones.

Pero, además, es esposa de Andrés Avila, quien recordemos en julio de 2020 fue nombrado por el exministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, como presidente de la Sociedad de Activos Especiales, SAE.

Hay otro contrato entregado al exmagistrado del Consejo Nacional Electoral, Héctor Elí Rojas, quien estuvo en ese tribunal al mismo tiempo que Carlos Camargo y fueron dos de los magistrados denunciados por prevaricato al tumbar el proceso de revocatoria del exalcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa.

Rojas obtuvo un contrato para asesorar al director nacional de la Defensoría para la modernización de las políticas internas institucionales de la dirección y sus grupos de trabajo por $142 millones, lo que significan honorarios por $15 millones 800 mil hasta el 31 de octubre de 2021. Uno de los más altos entre los contratistas de la entidad.

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Seguimos con Carolina Villegas, ella es hija del empresario Luis Bernardo Villegas, quien fue mencionado en una grabación del testigo Jorge Pizano con el exfiscal Néstor Humberto Martínez en el caso Odebrecht. Además, en una investigación realizada en su momento por el representante David Racero, se reveló que la campaña al concejo de Bogotá en 2015, de la bancada del Centro Democrático habría sido financiada en un 15% con recursos de coimas que pagó la multinacional y el financiador de esa campaña era justamente el señor Villegas.

Carolina Villegas, la nueva contratista de la Defensoría, fue en ese entonces candidata al concejo de Bogotá en la lista del Centro Democrático y ha sido muy cercana a ese partido, incluso como coordinadora en Bogotá de la campaña presidencial de Óscar Iván Zuluaga, y aunque hoy debe adelantar acciones para conocer,  por ejemplo, qué pasó con el bombardeo en el campamento de Gentil Duarte donde murieron menores de edad, pone trinos en donde muestra abiertamente su filiación política apoyando al Ministro de Defensa, Diego Molano.

El contrato de asesoría en esa delegatura que tiene Villegas es por $154 millones, va hasta diciembre de ese año lo que quiere decir que recibirá honorarios mensuales por valor de $14.000.000, un valor nunca pagado en esa dependencia.

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Y otra denuncia que hemos recibido en la W es un modus operandi del defensor Camargo a la hora de entregar las defensorías regionales apenas llegó a su cargo. Es el caso, por ejemplo, de la defensoría de Boyacá a la que llegó el señor Iovanni Pardo Pinzón. Este nuevo defensor regional es cuota del representante a la cámara del Partido Liberal, Rodrigo Rojas Lara, quien tomó la vocería de su bancada y logró que el entonces candidato Camargo se reuniera con el jefe de ese partido, Cesar Gaviria y así consiguiera el apoyo y los votos para llegar a la Defensoría.

Una vez llegó a la entidad, Camargo habría pagado el favor al representante Rojas Lara sacando de manera abrupta al defensor que estaba en este momento en Boyacá. Hablamos del señor Mauricio Reyes, quien incluso fue amenazado de ser declarado insubsistente si no renunciaba y después de esa renuncia se nombró a Pardo Pinzón como nuevo defensor en esa región del país.

Voces de extrabajadoras de la Defensoría del Pueblo

Asimismo, en Sigue La W, Narcy Luz Daza Balcázar, quien trabajó 19 años y 9 meses en servicios generales de la Defensoría del Pueblo en La Guajira, comentó que hay mucho “inconformismo” de parte de algunas trabajadoras, porque “dieron toda la vida a ese servicio” y ahora “nos echaron sin saber por qué”.

Según afirmó, el defensor del Pueblo, Carlos Camargo, “de allá arriba dio la orden de no darnos contrato a las que ya veníamos contratando, que hasta ahí llegábamos. No fueron capaces de decir que nosotros no íbamos más”. Esto resultó en 85 mujeres desempleadas, lo que se califica como “desastre laboral”.

Por su parte, Claudia Lorena Calle, quien trabajó 4 años en servicios generales de la Defensoría del Pueblo en Risaralda, aseguró que “me encuentro totalmente triste por lo que hizo el Defensor”, a quien llamó para “suplicar que no nos dejara sin empleo”, debido a que “vivimos del día a día”.

La respuesta de Camargo, según contó Calle, fue “un fuerte abrazo, se me sale de las manos”. A esto, la trabajadora se cuestionó “¿cómo se le va a salir de las manos a un Defensor que manda y que da las órdenes? Estoy decepcionada de Duque. Somos madres del conflicto armado, víctimas de la violencia, cabezas de familia, pero no tenemos empleo y pueden quitarme mi casa”.

“El Defensor es el que da la orden, eso tengo entendido”, manifestó, añadiendo que “El Doctor (Carlos) Negret nos defendía a nosotros. Tenía la palabra de decir que le dejaran el mismo personal, lo mismo ha debido hacer Camargo, pero dijo ‘echémosla a todas y que vengan las nuevas’. Yo lo llamé y le rogué, pero el Defensor no tiene corazón. La misión del Defensor es defender. Estoy muy triste y lloro. Queremos justicia”.

Sigue La W conoció más contratos que el defensor del pueblo, Carlos Camargo, ha entregado durante su administración a políticos y exmiembros de la rama judicial, que podrían ser sus amigos o conocidos, y que en varios casos aunque no cuentan con la experiencia para los cargos son por altas sumas de dinero. Esto en plena situación de crisis económica por la que atraviesa el país.