Los abusos de la Policía durante las protestas según Human Rights Watch

Un informe de Human Rights Watch (HRW) denuncia abusos del Esmad durante las protestas que tuvieron lugar el año pasado en Colombia. En Sigue La W habló el director de esta entidad, José Vivanco, sobre estas fallas de la Policía a la hora de contener las manifestaciones públicas.

Según Vivanco, durante las protestas “se produjeron graves abusos, tanto en detenciones arbitrarias como golpizas brutales hacia aquellos que participaron pacíficamente, a transeúntes y a periodistas”. Además, cuestionó la capacidad de la fuerza pública de distinguir entre los “manifestantes violentos y los manifestantes pacíficos”, ya que “a todos les aplicaron un uso excesivo de la fuerza”.

SI bien la Policía tiene el “deber de proteger el orden público, especialmente cuando se ve amenazado por actos de violencia y vandalismo”, esto no “autoriza a restablecer el orden público de cualquier manera”, como tampoco “tiene licencia para golpear brutalmente a las personas, sobre todo a quienes protestan pacíficamente”. “Tenemos videos que muestran estos graves abusos”, aseguró.

En Colombia, el artículo 155 del Código Nacional de Policía permite un traslado de protección por parte de esta entidad a aquellas personas cuya vida esté en riesgo. Si bien este artículo tiene un carácter eminentemente humanitario, HRW verificó que la Policía “se aprovechó de esta figura para detener a periodistas e inclusive a transeúntes y manifestantes pacíficos” aun cuando “no existían causales legales para hacerlo”.

Sobre el caso de  Dilan Cruz, el director de Human Rights Watch afirmó que “hubo un uso irregular de armas de fuego”. “Se usa una especie de calcetín con municiones que utilizan unas escopetas especiales del Esmad”, añadió. Estas escopetas deben ser empleadas “a una distancia específica”; sin embargo, “se le disparó a 20 metros de distancia”. Vivanco confirmó otro caso “similar” al de Dilan Cruz. Esta persona “está siendo atendido en un hospital y creemos que es posible que no vuelva a caminar. Las lesiones son serias, no se respetaron los protocolos para usar estas armas que pueden transformarse en armas letales”, aseveró.

“Verificamos que en mucho casos la Policía se excedió en el uso de la fuerza y cometieron abusos serios como brutalidad de la Policía. Con (Fabio) Espitia nos reunimos en enero pasado y nos informó que tenía más de 72 casos abiertos por violencia policial. Creemos que hay muchos casos más. Se debe sancionar a los responsables de abusos”, concluyó.