Fin de la operación minera de Prodeco en Colombia: Los 'peros' de la empresa al Gobierno
Hoy la empresa tiene 1.200 empleados, que saldrán gradualmente. Para el mantenimiento de las minas y posterior entrega, solo se requerirán 300 trabajadores.
La W sigue haciéndole seguimiento a la disputa entre el Grupo Prodeco y la Agencia Nacional de Minería (ANM).
¿Detalles nuevos? Confirmamos que el Grupo no ha recibido ningún contacto del Gobierno en la dirección de llegar a un acuerdo para negociar esa suspensión temporal. Lo que indica que está en marcha la salida de toda la operación minera de la holding en Colombia.
Segundo: Una de las grandes molestias de Prodeco es que ellos presentaron en septiembre de 2020 un recurso de reposición contra los actos administrativos de la ANM, para solicitar la suspensión por 18 meses (luego de negada la suspensión por cuatro años). Un recurso que resolvió la ANM de forma desfavorable para la empresa hasta el 18 de diciembre (casi cuatro meses después), y cuando el plazo para esa respuesta es de dos meses.
Frente a ello, la ANM indicó que “la ley otorga dos meses para resolver los recursos, no obstante da la posibilidad de decretar práctica de pruebas por un plazo de 30 días, como en efecto ocurrió en este caso. Por ello el término que se tomó la entidad para resolver”.
Sobre este caso:
- Prodeco anunció que inició proceso para devolver sus títulos mineros en Colombia
- Glencore le envió carta al presidente Duque antes de la salida de Prodeco del país
Tercero: Lo que viene. El Grupo Prodeco tiene la obligación de entregar a la ANM las minas Calenturitas y La Jagua para que puedan seguir explotadas y para que el Estado proceda a dárselas a quien pueda hacerse cargo. A Prodeco también le preocupa, según confirmamos, que el Gobierno se demore en recibirlas y, por ende, en retomar la productividad de las mismas.
Cuarto: De 7.600 empleados entre directos e indirectos que tenía el Grupo en 2019, hoy quedan 1.200, que saldrán gradualmente. Para hacer el mantenimiento de las minas y proceder a su entrega, estarán solo 300 trabajadores, quienes luego de ese proceso, saldrán de la compañía.
Quinto: Para la empresa los argumentos para solicitar y reiterar la necesidad de una suspensión temporal fueron y continúan siendo sólidos. Entre ellos: los precios del carbón, que bajaron en 2020; cada una de las minas requería US$500 millones para poder reiniciar la operación; y los problemas geológicos.