Es importante dejar a un lado la politización de la justicia: Hernando Yepes Arcila

Alberto Casas recibe al abogado, docente y columnista colombiano, Hernando Yepes Arcila al programa de este 20 de abril.

“Un eminente jurista que une su voz muy apropiada para el entendimiento de los enredos judiciales, y con una simpatía arrolladora de humanista”, así le dio la bienvenida Alberto Casas. 

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Contó que la opinión generalizada de sus conocidos, amigos y familia es que debía estudiar derecho porque tenía una "notable" inclinación hacia la política, el ejercicio dialéctico, y fortaleza en los debates de la adolescencia. "Yo me tragué el cuento. Mis educadores, los padres Jesuitas, también me confirmaron que esa era mi orientación”, dijo.

Pues cuando entró a la facultad afirmó: “encontré que allí me expresaba perfectamente, era el ambiente en el que quería vivir y el tipo de ejercicio en el que quería ocupar mi vida”.

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Igualmente, relató que en ese tiempo Manizales era la “la aldea iluminada”, aquella que había logrado formar “con un esfuerzo intelectual muy productivo” a esa generación de Gilberto Álzate, los llamados ‘Leopardos’, Fernando Londoño, entre otros.

Por otro lado, este jurista manizaleño era fervoroso amante del bambuco que escuchaba tomando aguardiente. Con estos grupos tenía centros de encuentro "y a quienes contraba difícilmente por la escasez de recursos cuando uno es joven", expresó el doctor Yepes. 

Alberto Casas descubrió su gusto musical, por eso le preguntó por Carlos Cano, quien se convirtió en su cantautor y poeta favorito. Para el doctor Yepes y su esposa era "una devoción desde que lo ví. Me gustaba su forma de pensar sobre la vida. Ángela (su esposa) y yo lo hemos seguido en toda su discografía". 

Después de que Cano murió, se fué con su esposa a buscar la tumba. Eran muy devotos.  

Respecto a su posición jurídica, habló sobre el plebiscito de 1957 del que le pareció acertada la modificación de la forma de elección de los magistrados de las altas cortes que eran designados a través de las listas que enviaba la Presidencia de la República, "por la figura de magistrados vitalicios, cooptados y que se destacaban por su conocimiento, es decir, elegidos por meritocracia", afirmó. 

Manifestó que el sistema tuvo que ser invervenido para crear fórmulas que lograran una justicia con excelentes rendimientos técnicos y profesionales "para dejar de lado su politización". 

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Finalmente, planteó que de presentarse un referendo constitucional, requiere hacerse con un grupo calificado de personas o "comisión de reforma consitucional, dotados de ciencia, patrotismo suficiente y con servicio al país" para que hagan el texto y la propuesta estructurada.

Alberto Casas cerró diciendo que la sabiduría del doctor Hernando Yepes Arcila, deberá servir para hacerle frente a la crisis de la Rama Judicial que también vive el país.