En el gobierno Duque, 692 líderes sociales han sido asesinados: Indepaz
Según el instituto, más de 1.000 defensores de derechos humanos fueron ultimados luego de la firma del acuerdo de paz.
Asesinato de líderes sociales en Colombia. Foto: Colprensa(Thot)
El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) presentó el informe ‘Posacuerdo Traumático’, en el que se presentó una radiografía de la continuación de la violencia en Colombia (2016 a la fecha) por medio del asesinato de los defensores derechos humanos y excombatientes de las Farc.
Según Indepaz, en los últimos 4 años 1.090 líderes comunales fueron víctimas de ataque armados, con el año 2018 como el más grave con 298 muertos, seguido muy de cerca por el 2020 con 291 defensores ultimados. Además, señalaron que el 63% de los homicidios se han perpetrado en el gobierno del presidente Duque.
Por territorios, el análisis concluye que los 1.090 asesinatos se perpetraron en 288 municipios de la geografía nacional. El departamento del Cauca es el más afectado con 264 líderes comunales ultimados, seguido por Antioquia en donde 140 defensores han sido asesinados. Posteriormente se ubica Nariño con 108 muertos y el Valle del Cauca con 77 registros.
Los indígenas son los líderes comunales más golpeados por los ataques armados con 294 víctimas, seguidos por 203 campesinos y 125 defensores cívicos.
Sobre el asesinato de los excombatientes de las Farc en reincorporación, el Instituto concluye que la cifra asciende a 246 exguerrilleros. Los departamentos de Cauca (43) y Nariño (30) lideran los territorios más afectados.
En relación con los grupos armados ilegales activos, Indepaz señaló que el ELN pasó de tener 2.500 miembros activos a 3.000 efectivos, que las disidencias de las Farc están compuestas por 1.200 unidades y que los grupos paramilitares residuales están integrados por 3.500 miembros con influencia en 255 municipios.
Como conclusión, el Instituto manifiesta que, aunque hay una cadena de violencia la cual se mantiene, el acuerdo de paz trajo indudablemente un descenso en indicadores como atentados, secuestros o víctimas de minas antipersonales (presentaron una reducción del 90% o más).
