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En 30 años, guerrillas cometieron más de 3.600 atentados contra infraestructura petrolera

Empresarios y Comisión de la Verdad examinan afectaciones a la infraestructura petrolera en Colombia en medio del conflicto armado.

Un informe de la Fundación Ideas para la Paz (FIP) reveló que en 30 años las Farc y el ELN perpetraron más de 3.600 atentados contra la infraestructura petrolera en Colombia.

El informe será entregado al Presidente de la Comisión de la Verdad, Francisco de Roux, en un foro público el próximo 30 de julio, en el que participarán el vicepresidente de Ecopetrol, Alberto Consuegra, el Presidente de la Asociación Colombiana de Petróleos, Francisco Lloreda, y Astrid Martínez de Fedesarrollo.

El informe Verdad y afectaciones a la industria petrolera en Colombia en el marco del conflicto armado' fue elaborado por la Fundación Ideas para la Paz (FIP) con el apoyo de la  Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento, CODHES en el marco de su Programa de Participación y Reparación Colectiva de las Víctimas.

"Nuestra investigación muestra cómo en el marco del conflicto armado se perpetraron ataques no solo para afectar las empresas petroleras sino también a las comunidades”, explicó María Victoria Llorente, directora ejecutiva de la Fundación Ideas para La Paz, en entrevista con la Hora Del Regreso.

El documento revela que durante los años 2000, 2001 y 2013 se llevaron a cabo el mayor número de acciones armadas contra infraestructuras petroleras, casi el 26% del total de atentados en 30 años, y que los departamentos donde más se perpetraron estos actos fueron Arauca, Santander, Norte de Santander, Putumayo y Nariño.

“Siempre se mostraban las tremendas afectaciones medioambientales, pero cómo afectaba a los seres humanos no era tan visible. El informe muestra eso, las afectaciones a la infraestructura. Hicimos énfasis en las áreas de influencia de los oleoductos Caño Limón-Coveñas y Trasandino”, explicó Llorente.

 Este informe analizó hechos contra la infraestructura de hidrocarburos entre el primero de mayo de 1986 y el 24 de noviembre de 2016 en el país. También recoge las historias de personas que vivieron atentados en estos oleoductos.