El chat clave del escándalo de reventa de boletas de la Selección Colombia
Este chat dejaría en evidencia que desde TicketYa se estaba orquestando la reventa de boletas para pagar unas deudas no reportadas.
La W presenta la transcripción del registro de unas conversaciones de WhatsApp que reposan en el expediente de la investigación sobre la reventa de boletas de las eliminatorias al Mundial de Fútbol de Rusia 2018, en el cual terminaron involucradas las empresas de boletería TicketShop y TicketYa, junto a la Federación Colombiana de Fútbol.
En esta conversación aparecen los dos empresarios detrás de TicketShop (César Carreño e Iván Arce) y dos de los integrantes del grupo TicketYa (Alberto Romero y Rodrigo Roldán Junior). En el diálogo se ve como estos últimos hacen el reclamo a los socios de TicketShop por haber vendido unas boletas a las que esperaban sacarle mínimo 100.000 pesos de ganancia frente a su valor nominal.
"Con ganancias de solo $ 100.000 por boleta se podría pagar casi el 30% de los créditos de la calle", asegura Roldán Junior en el diálogo y luego puntualiza "esa era la joya de la corona para pagar los créditos de Elías".
Los créditos a los que hace mención Roldán no corresponderían al crédito ante Bancolombia para pagar el anticipo de la boletería a la Federación Colombiana de Fútbol (FCF), sino otros créditos cuyo origen y destino aún no han sido definidos por las autoridades, aunque se señala que esos podrían haber sido dineros manejados irregularmente para conseguir el contrato de boletería por parte del grupo formado por TicketYa y TicketShop.
En ese mismo chat, Alberto Romero cuestiona a sus socios de TicketShop por haber vendido unas boletas que debían protegerse y exige la devolución de esas boletas que ya se habían vendido a través de internet, como responde Iván Arce en la conversación.
"Yo no me llevé esa boletería de (sic) puso a la venta para cumplir con los compromisos adquiridos adicional está el reporte de la venta con su respectivo comprador", dice Iván Arce.
Este chat dejaría en evidencia que desde TicketYa se estaba orquestando la reventa de boletas para pagar unas deudas no reportadas o "deudas de la calle" cuyo origen y destino debe ser esclarecido por las autoridades, toda vez que el crédito con el Bancolombia para cerrar el negocio con la FCF fue debidamente reportado.