¿Colombia pudo prever la devastación del huracán Iota en San Andrés y Providencia?
Desde el sábado 14 de noviembre en la mañana, era evidente que se debía tener los ojos puestos sobre el archipiélago.
Durante el pasado puente festivo, los efectos del invierno se recrudecieron en todo el país: inundaciones, deslizamientos y caos a causa del fenómeno de La Niña fueron provocados por el paso del huracán Iota, que alcanzó la categoría cinco el pasado 16 de noviembre.
Los reportes del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM) dieron cuenta de las fuertes lluvias con rachas de viento en San Andrés, Providencia y el occidente del mar Caribe por el golpe del huracán.
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En cuanto a las precipitaciones, el oriente de Antioquia, centro y occidente de Santander, Tolima, Huila, Cundinamarca, Boyacá, Valle del Cauca, oriente de Cauca, Meta, Guaviare, Caquetá y Amazonas se vieron más afectados por las fuertes lluvias.
A su vez, el Gobierno Nacional ha visitado los departamentos de Antioquia, Bolívar, Chocó y San Andrés para atender esta crisis humanitaria. El presidente Iván Duque ha ordenado la instalación de Puestos de Mando Unificados (PMU) con los que se buscan identificar los riesgos y prever situaciones como las ya ocurridas en Cartagena y Dabeiba, que han dejado más de 1.000 personas damnificadas.
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¿CÓMO FUE EL RECORRIDO DEL HURACÁN IOTA?
Pese a que no es posible controlar un huracán, las autoridades hacen un seguimiento minuto a minuto que marca su ruta. Incluso, para una isla con infraestructura como la Providencia, un huracán categoría uno puede tener graves consecuencias.
Desde el viernes 13 de noviembre, a las 10:00 P.M, fue la primera vez que el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos habló sobre la isla de San Andrés y Providencia. Cabe señalar que para el NHC, "vigilancia" implica que condiciones de huracán o tormenta tropical son posibles en la zona bajo aviso, mientras que "aviso" no es que sean posibles sino que se esperan esas condiciones climáticas en las próximas 36 o 48 horas o menos.
En dicho reporte del viernes 13, se advertía que Iota podría fortalecerse y se hizo un llamado a que las autoridades en el archipiélago hicieran monitoreo.
Posteriormente, el sábado 14 de noviembre, con vientos de 65 km/h y aún con la condición de tormenta tropical, se mantuvo la misma reseña, insistiendo en que se esperara que Iota siguiera fortaleciéndose.
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Para las 10 de la mañana de ese mismo día, la alerta incrementó y ya se hablaba de un aviso de tormenta para San Andrés y Providencia, cuando se comenzaban a sentir las condiciones climáticas.
A la 1:00 P.M. de ese mismo sábado, con Iota aún como tormenta tropical y con vientos de 85 km/h, ya se hablaba de una vigilancia de huracán para la isla de Providencia, alertando que empezaría a fortalecerse rápidamente. Más adelante, para las 4:00 P.M, ya se hablaba de aviso de huracán para Providencia y vigilancia de huracán y aviso de tormenta tropical para San Andrés.
A las 10:00 P.M, Iota ya era un huracán de categoría uno, con vientos de 110 km/h. Es decir, en 24 horas, Iota pasó de 65 a 110 kilómetros por hora.
Al día siguiente, domingo 15 de noviembre, ya se hablaba de que Iota se convertiría en un huracán mayor. A las 7:00 A.M, el huracán ya tenía vientos de 150 km/h, con ráfagas catastróficas y a las 4:00 P.M. se vuelve a advertir el aviso de huracán para Providencia y vigilancia de huracán y aviso de tormenta tropical para San Andrés.
A las 4:00 A.M. del lunes 16 de noviembre, cuando Iota ya era de categoría cuatro y estaba a 40 kilómetros al este de Providencia, tenía vientos de 230 km/h. Y a las 10:00 A.M, alcanzó la categoría cinco.