Disidencias de las Farc denuncian operaciones militares en contra de negociaciones de paz

La Coordinadora Nacional del Ejército Bolivariano (CNEB), más conocida como la segunda marquetalia o las disidencias de ‘Walter Mendoza’ emitió un comunicado en el que denuncia acciones de la fuerza pública que, según ellos, ponen en riesgo el proceso de paz iniciado con el Gobierno colombiano.

El documento, firmado por Walter Mendoza, jefe negociador del grupo, detalla una serie de hechos ocurridos desde la instalación de la mesa de diálogo en Caracas el 24 de junio de 2024 y señala que las operaciones militares han generado zozobra tanto entre sus tropas como en la población civil de las zonas de influencia.

El comunicado menciona que, desde el inicio de las negociaciones, se han registrado incidentes como el asesinato de un comandante del Bloque Alfonso Cano y de un menor de edad el mismo día de la instalación de la mesa en Caracas.

También denuncian un ataque con tanquetas en la comunidad indígena de Inda Sabaleta, que dejó a un joven muerto y varios heridos, además de enfrentamientos y operativos en el Pacífico nariñense y el Putumayo, que, según el grupo, afectan la confianza en el diálogo y la seguridad de las comunidades locales.

En su declaración, estas disidencias afirman que, pese a haber declarado un cese unilateral de fuego en diciembre como muestra de buena voluntad, sectores al interior de las fuerzas armadas habrían aprovechado esta tregua para realizar operaciones en su contra.

Según el grupo, estas acciones incluyen el desembarco de tropas en zonas rurales, ataques contra civiles y la irrupción en áreas designadas para actos humanitarios, calificándolas como provocaciones que buscan debilitar el proceso de paz.

Walter Mendoza subrayó que el compromiso con el diálogo no debe interpretarse como una falta de capacidad de respuesta por parte del grupo, y pidió al gobierno claridad sobre la coordinación entre las fuerzas militares y el equipo negociador. En su mensaje, cuestionó si existe un mando unificado dentro de las fuerzas armadas y acusó a sectores “guerreristas” de sabotear los avances logrados en la mesa de negociación.

El comunicado concluye con un llamado al gobierno para que pase del discurso a los hechos y tome medidas concretas para garantizar la integridad del proceso. Mientras tanto, la incertidumbre persiste en vísperas de un nuevo encuentro en Puerto Asís, Putumayo, donde las expectativas sobre el futuro de las negociaciones siguen en juego. Hasta el momento, el gobierno no ha emitido una respuesta oficial frente a estas denuncias