Deuda con Aire no compromete suministro energético, pero pone en riesgo inversiones: Juan Ortega

En una reciente entrevista en La W, con Julio Sánchez Cristo, el presidente del Grupo de Energía de Bogotá, Juan Ricardo Ortega, confirmó que la empresa Aire acumula una deuda superior a los 50.000 millones de pesos con el grupo.

La situación se agrava tras la decisión de la Superintendencia de Servicios Públicos de permitir a Aire no realizar pagos a sus proveedores, medida que ha generado incertidumbre en el sector eléctrico. A pesar de esto, Ortega descartó un posible desabastecimiento energético en Bogotá y Cundinamarca en los años 2026 y 2027, aunque advirtió sobre riesgos a largo plazo.

El sector enfrenta complicaciones derivadas de atrasos en los subsidios que cubren las tarifas de los estratos 1, 2 y 3, los cuales llevan dos trimestres sin ser desembolsados por el Gobierno Nacional. Según Ortega, esta falta de pagos afecta la capacidad financiera de las empresas proveedoras de servicios eléctricos, complicando la estabilidad del sistema.

“La deuda de Aire con nosotros ya supera los 50.000 millones de pesos. Es un servicio esencial en el que no se pueden tomar medidas drásticas, ya que se trata de transmisión de energía, diseñada para no tener riesgos de contraparte. Sin embargo, la eliminación de garantías en este esquema ha puesto a todo el sector en una posición muy compleja”, explicó.

A pesar de la creciente deuda, Ortega aseguró que no existe un riesgo inminente de apagones en el corto plazo. “No creo que haya problemas de suministro en 2025 y 2026. Sin embargo, el verdadero peligro está en la incertidumbre que esta situación genera, pues podría limitar las inversiones necesarias para garantizar el abastecimiento futuro”, indicó.

El presidente advirtió que el país requiere una inversión de al menos 12 mil millones de dólares en generación de energía para satisfacer la creciente demanda económica. “La falta de señales claras para los inversionistas extranjeros, quienes deberían traer esos recursos, podría derivar en problemas de suministro en 2027 o 2028″, afirmó.

Ortega destacó que las decisiones recientes del Gobierno han generado desconfianza en los mercados internacionales, afectando la capacidad de atraer capital extranjero.

“Colombia no dispone de los 12 mil millones de dólares necesarios para garantizar la generación futura. Es vital ofrecer certeza y estabilidad para que los prestamistas e inversionistas se sientan seguros de inyectar esos recursos en el país”, subrayó.

La situación descrita refleja la necesidad urgente de soluciones estructurales. Ortega hizo un llamado al Gobierno Nacional para cumplir con los pagos pendientes de subsidios y garantizar un entorno financiero estable que permita al sector energético operar con normalidad y planificar el futuro.

Con más de 50.000 millones de pesos en juego, la viabilidad financiera del sector y la capacidad de garantizar el suministro energético a largo plazo dependerán de acciones inmediatas que estabilicen el panorama. Aunque Bogotá y Cundinamarca no enfrentan apagones en el corto plazo, los retos para 2027 y 2028 están marcados por la incertidumbre.