Abogados de exdirector de Abercrombie, acusado de tráfico sexual, aseguran que padece demencia
De acuerdo con sus abogados, Mike Jeffries tiene la memoria deteriorada, es lento a la hora de procesar ideas y se confunde con facilidad.
Los abogados del exdirector ejecutivo de la empresa de moda Abercrombie & Fitch Mike Jeffries alegaron que su cliente sufre demencia y solicitaron una audiencia para determinar si puede ser juzgado en el caso en su contra por explotación sexual.
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Un neurólogo examinó al acusado, de 80 años, y apuntó que probablemente padece demencia y Alzhéimer tardío, según un documento judicial presentado por la defensa ante un tribunal federal de Long Island, en Nueva York.
De acuerdo con sus abogados, Jeffries tiene la memoria deteriorada, es lento a la hora de procesar ideas y se confunde con facilidad.
Tanto la defensa como la fiscalía solicitaron al juez que los expertos que evaluaron al exdirector de Abercrombie testifiquen en una audiencia destinada a determinar si el hombre puede ser sometido a juicio.
Jeffries fue detenido el pasado octubre junto a otras dos personas acusadas de tráfico sexual y quedó en libertad condicional tras pagar una fianza de 10 millones de dólares tras declararse no culpable.
La Fiscalía acusa a Jeffries, a su pareja, Matthew Smith; y a un tercer colaborador, James Jacobson, de orquestar una operación de tráfico sexual y prostitución entre 2008 y 2015.
Según la acusación, atraían a hombres jóvenes a fiestas sexuales en la acaudalada zona de los Hamptons (Lons Island) y los forzaban a mantener relaciones con la promesa de modelar para los anuncios de la compañía.
Los arrestos se produjeron un año después de que la BBC publicara un informe que denunciaba que Jeffries explotaba a hombres en fiestas sexuales que organizaba.
El artículo citaba a 12 hombres que dijeron haber asistido u organizado eventos que incluían actos sexuales para el ahora exdirectivo de Abercrombie y su pareja.
El exdirector ejecutivo de Abercrombie, que dirigió la empresa entre 1992 y 2014, se retiró con un paquete de jubilación de más de 25 millones de dólares.