Misión Guajira un año después: Los bolis a mil pesos en la comunidad de Pondore
Gracias al proyecto de energía sostenible, en el desierto de la Guajira pasaron de consumir agua salobre a productos más elaborados.
Guajira
En medio del desierto Guajiro a más de 30 o 40 grados centígrados, la comunidad de Pondore ya puede disfrutar de unos refrescantes bolis, esto gracias al proyecto de energía sostenible que lidera Misión Guajira, la abuela de María José Oriana una joven que vive en esta comunidad, los prepara y vende a toda la población.
“Lo que hace mi abuela es bolis de leche con kola, no hace de frutas porque eso es muy caro. Los vende a mil. Ella hace 100 o 200 bolis y se compran enseguida”, dijo María José Oriana.
Gracias a Misión Guajira estas comunidades no solo disfrutan del agua potable, también la consumen helada y hasta con hielo, hielo en pleno desierto, parece una historia macondiana, pero el trabajo conjunto y la unión de lo público y lo privado hicieron esto posible.
Podemos decir entonces que en el desierto de la Guajira pasaron de consumir agua salobre a productos más elaborados. “Estoy muy agradecida con Misión la Guajira, los aliados del grupo Aval, Promigas y Presidencia de la República”, precisó.
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Este alimento tan sencillo para muchos es fuente de alegría para aquellos que anteriormente padecían de sed y del sofocante calor en medio del desierto, en este lugar valoran mucho lo que para otros no es nada.