Indígenas Emberá retuvieron a funcionarios de la ANT y la entidad les ofreció dialogar

Bogotá

El edificio principal de la Agencia Nacional de Tierras (ANT) vivió momentos de tensión en la noche de este martes, 26 de noviembre, cuando un grupo de indígenas Emberá retuvo a cincuenta funcionarios públicos, incluido un juez, en protesta por el incumplimiento de una reunión pactada con el Gobierno.

Las comunidades reclamaron un cónclave con representantes del Gobierno nacional. Inicialmente, el encuentro estaba programado para las 7:00 p.m., cuando las comunidades cumplían cerca de veinticuatro horas desde el inicio de su llegada a Bogotá para presentar nuevamente demandas territoriales.

El grupo de indígenas Emberá, de Risaralda, arribó a la capital del país entre la noche del 25 de noviembre y las seis de la mañana del 26 para instalarse en inmediaciones de la ANT. Según sus líderes, son más de cuatro mil personas, mientras que, según cifras de la Alcaldía distrital, en realidad son unas dos mil.

Carlos Fernando Galán, alcalde de Bogotá, responsabilizó al gobierno de Gustavo Petro. “La situación de orden público y la amenaza a las poblaciones indígenas en Risaralda no es responsabilidad de Bogotá ni de la Agencia Nacional de tierras”, remarcó el mandatario.

Según Galán, “estas personas vienen a exigirle garantías al Gobierno para permanecer en sus territorios. Y claro que esta situación genera un problema en Bogotá, pero la responsabilidad de resolverlo de fondo es del Gobierno nacional”, por lo que la administración de Petro es la que debería responder.

Las exigencias de las decenas de indígenas, de hecho, sí se dirigen al Ejecutivo. Sus demandas se relacionan con acceso a tierras y con mejores condiciones de vida para hacer frente, por ejemplo, a la muerte de niños por cuenta de la desnutrición infantil y a la inseguridad que prima a pesar de los esfuerzos de paz total.

Ante la falta de respuesta de entidades gubernamentales, la Guardia Indígena Emberá detuvo la salida de funcionarios y periodistas de las instalaciones de la ANT. Los indígenas instalaron una especie de dispositivo que rodeó la entrada al lugar e impidió que empleados y concurrentes pudieran movilizarse.

Pasadas las once de la noche, la Guardia se retiró. Quienes se desempeñaban en la Agencia comenzaron a salir. Preliminarmente, se conoce que fueron cincuenta los funcionarios que no pudieron salir con libertad hasta que el Gobierno ofreció concretar una mesa de diálogos que se instalará este 27 de noviembre.

Sin embargo, según el director de la ANT, el exalcalde de Villavicencio Felipe Harman, “no existe ni existió retención de funcionarios”. “Estamos aún dialogando y organizando la agenda de mañana junto a la comunidad Emberá”, afirmó en su cuenta de X, atribuyéndole la tensión a “un patrullaje de un drone”.

Harman aseguró que la Agencia de Tierras está trabajando “de la mano de las familias de la comunidad Emberá” para lograr “una negociación justa y equitativa” frente a un pliego de solicitudes compuesto por “acceso a tierras, vivienda digna, salud, educación, seguridad, entre otros”.

Todas esas solicitudes comenzarán a gestionarse este miércoles, de acuerdo con la Agencia, junto a representantes de ministerios y viceministerios, en medio de unos diálogos “revestidos de armonía”. “Estamos dispuestos a continuar el día de mañana”, indicó la entidad cerca de la medianoche.

Uno de los gobernadores indígenas presentes en la Agencia declaró que la minga risaraldense “sigue en concertación con el Gobierno”. “Dios mediante, mañana seguiremos, mañana será otro día, un día mejor para los pueblos indígenas de Risaralda”, dijo en un video difundido por la ANT.

Las delegaciones del Gobierno y del pueblo Emberá no contarán con la Alcaldía de Bogotá durante el proceso. W Radio confirmó que la alcaldía no tiene previsto realizar ninguna gestión para reubicar a los más de dos mil miembros de las comunidades indígenas que permanecen acampando.

Este 27 de noviembre, a las ocho de la mañana, se llevará a cabo la reunión entre la ANT y la representación indígena, un día después de que se completara la llegada de 68 buses que viajaron desde el suroccidente del país. A esta hora, los indígenas siguen en carpas en el sector del Centro Administrativo Nacional (CAN).