Concejo de Bogotá impulsa proyecto de reestructuración con aumento de planta de personal

La corporación radicó un polémico proyecto liderado por su presidente, Juan Baena, que plantea la reestructuración de su planta de personal y la creación de nuevas dependencias.

Concejo de Bogotá imagen de referencia. Foto: Colprensa. / Álvaro Tavera

Bogotá

El presidente del Concejo de Bogotá, Juan Baena, radicó un proyecto de acuerdo que busca modificar la estructura organizacional de la corporación, marcando la primera reestructuración de este tipo en 12 años.

La iniciativa propone la creación de nuevas dependencias y la ampliación de la planta de personal con 33 nuevos empleos, lo que ha generado debate en un contexto en donde la administración distrital aboga por la austeridad presupuestal.

El proyecto establece la creación de tres nuevas áreas dentro del Concejo: la Dirección de Talento Humano, la Subdirección de Participación y Relación con la Ciudadanía, y la Oficina de Tecnología.

Le puede interesar

La justificación de Baena se centra en la modernización institucional, argumentando que la falta de estas dependencias ha limitado la capacidad operativa de la entidad. “Es necesario un rediseño para gestionar mejor los recursos humanos y las demandas tecnológicas de una institución que ha crecido exponencialmente en los últimos años”, afirmó el concejal.

El mayor foco de atención recae en la ampliación de la planta de personal. Se propone la creación de 30 nuevos cargos profesionales y 3 directivos, con un costo anual proyectado de más de $6.600 millones.

Esta cifra ha sido vista con escepticismo en momentos en que el recién elegido alcalde, Carlos Fernando Galán, ha instado a todas las entidades distritales a reducir el gasto y enfocarse en la eficiencia presupuestal.

Uno de los puntos más polémicos es el impacto fiscal del proyecto. Según la exposición de motivos, se requerirá un aporte significativo del presupuesto del Concejo para cubrir los nuevos gastos.

No obstante, el proyecto asegura que el 60% de estos recursos provendrá de una reducción en los gastos operativos y de la contratación de bienes y servicios.

Además, el proyecto justifica la necesidad de formalizar labores que hasta ahora han sido realizadas por contratistas a través de prestación de servicios, una práctica común en la administración pública.

La meta es reducir la dependencia de contratistas, asegurando que los cargos clave sean desempeñados por empleados de planta, con lo cual se espera mejorar la continuidad en los servicios.