Distrito solicita a Unidad de Víctimas acelerar retorno de la población Emberá en Bogotá
El Distrito instó a la Unidad de Víctimas a acelerar el retorno o reubicación de la población Emberá asentada en Bogotá desde hace más de tres años.
Indígenas de la comunidad emberá | Colprensa / Lina Gasca
La administración distrital, representada por la Consejera de Paz, Víctimas y Reconciliación, Isabelita Mercado, ha enviado una carta oficial a la Unidad para la Atención y Reparación Integral de las Víctimas, solicitando con urgencia que se aceleren los procesos de retorno o reubicación de la población Emberá que ha estado asentada durante años en la UPI La Florida y La Rioja.
La carta, firmada también por el alcalde Carlos Fernando Galán, busca dar continuidad al trabajo realizado en septiembre con el retorno de la población Emberá que había estado en el Parque Nacional Enrique Olaya Herrera.
“El 80% de esta comunidad ha manifestado su deseo de retornar o ser reubicada. Consideramos que no podemos perder el impulso logrado en el Parque Nacional, donde logramos articularnos de manera efectiva con el Gobierno Nacional”, señaló Mercado.
La población Emberá ha permanecido más de tres años en La Florida y cuatro en La Rioja, situación que ha puesto en evidencia la necesidad de fortalecer la atención a esta comunidad, especialmente en lo que respecta a sus derechos y condiciones de vida. Desde el Distrito, se ha reiterado el compromiso con la dignidad de estas familias y con la garantía de que el proceso de retorno o reubicación se desarrolle de manera sostenible.
“Reafirmamos nuestro compromiso con los derechos humanos, en particular los de niños, niñas, adolescentes y mujeres Emberá, quienes son los más vulnerables en estas circunstancias”, subrayó la Consejera.
El llamado también resalta la importancia de articular esfuerzos a nivel interinstitucional, tal como se hizo en el Parque Nacional, donde se logró una respuesta coordinada que permitió el retorno de las familias asentadas. Mercado insistió en que este tipo de acciones deben continuar para evitar que las comunidades sigan viviendo en condiciones precarias por tiempos prolongados.
