Sabalenka se sitúa al borde del número uno de la ATP al ganar su tercer título en Wuhan
En la primera manga, Sabalenka se mostró más sólida y regular desde el inicio y aprovechó los fallos de Zheng en el saque, uno de sus puntos fuertes, para romperle el servicio y asegurar el set.
La tenista bielorrusa Aryna Sabalenka se ha situado al borde del número uno en la lista WTA, que comanda la polaca Iga Swiatek, con su victoria, por tercera ocasión, en el Abierto de Wuhan (China) tras derrotar este domingo en la final a la china Qinwen Zheng en tres sets (6-3, 5-7 y 6-3).
La ganadora este año de dos Grand Slam, Estados Unidos y Australia, tuvo que sacar a relucir su mejor repertorio para doblegar a la campeona olímpica en París (7 en la WTA), aupada por el apoyo del público.
Con su cuarto título del año, Sabalenka se sitúa a 69 puntos de Swiatek en la lista mundial, quien no ha competido en el último de los diez torneos WTA 1000 del calendario femenino.
En la reedición de la final del pasado Abierto de Australia, la bielorrusa, de 26 años, y la china, de 22, desarrollaron un juego de gran nivel que prolongaron el encuentro durante más de dos horas y media.
En la primera manga, Sabalenka se mostró más sólida y regular desde el inicio y aprovechó los fallos de Zheng en el saque, uno de sus puntos fuertes, para romperle el servicio y asegurar el set.
Lejos de tirar la toalla, la jugadora china plantó cara a Sabalenka en el segundo, donde ambas desplegaron un juego de mucha calidad que alimentó la incertidumbre del resultado.
Sabalenka fue la primera en romper el saque, si bien la jugadora entrenada por el español Pere Riba se repuso y logró colocarse 5-3 con servicio a su favor.
La bielorrusa aguantó la presión para empatar a cinco y fue entonces cuando la tenista local sacó su mejor tenis para sumar los dos siguientes juegos y hacerse con un set que se prolongó durante una hora.
En la ronda definitiva, el desgaste físico pasó factura a Zheng, quien perdió dos servicios seguidos (0-3) ante el ímpetu de su rival. El partido parecía encarrilado, aunque un punto increíble con el que consiguió un ‘break’ (1-3) y que puso al pabellón en pie le insufló ánimos.
Zheng no aprovechó una nueva bola de ruptura para empatar a tres y dio alas a Savalenka para mantener la brecha y amarrar su tercer título en Wuhan tras los de 2018 y 2019.