Fondos para atender desastres en EE.UU. no fueron reasignados para ayudar a migrantes
Tras el paso del huracán Milton por las costas estadounidenses, internautas en redes sociales han afirmado que la FEMA se ha quedado sin fondos para asistir a los afectados por las tormentas tras malgastarse todo el dinero en la migración.
Es falso que la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) en EE.UU. se haya quedado sin dinero para las víctimas de los huracanes por haber desviado sus fondos hacia ayudas migratorias, como afirman tanto perfiles en redes como políticos locales, pese a que la entidad lo ha negado y la ley lo prohíbe.
Tras el paso del huracán Milton por las costas estadounidenses, que provocó la evacuación de más de cinco millones de personas, internautas en redes sociales como Facebook y X han afirmado que la FEMA se ha quedado sin fondos para asistir a los afectados por las tormentas tras malgastarse todo el dinero en la migración.
“El dinero de FEMA se está utilizando para brindar servicios como alimentos, seguridad y productos de higiene a los migrantes”, defiende un cibernauta.
Asimismo, otras publicaciones señalan: “Los federales dicen que no queda dinero para responder a los huracanes, después de que FEMA usara $640,9 millones este año para ayudar a los migrantes(sic)”.
El expresidente estadounidense y candidato del Partido Republicano, Donald Trump, aseguró en un mitin el pasado 3 de octubre en Michigan que la vicepresidenta Kamala Harris, “gastó todo su dinero de FEMA, miles de millones de dólares, en alojamiento para migrantes ilegales”.
Así, Trump insistió en la narrativa de que Harris “robó el dinero” para que “los migrantes ilegales voten por ella”.
La FEMA lo rechaza en un comunicado
No es cierto que la FEMA haya desviado fondos previstos para las catástrofes naturales como el huracán Milton en viviendas o ayudas para migrantes en situación irregular. La agencia lo ha negado en un comunicado y los fondos destinados a este tipo de ayudas, aparte de ser regulados por el Congreso, provienen de partidas presupuestarias distintas, según la información oficial disponible en línea.
Primero que todo, la FEMA emitió un comunicado el pasado 4 de octubre, tras las declaraciones de Trump, en el que defendió que “ningún dinero para las necesidades de respuesta por desastres ha sido desviado”.
En su web, la agencia calificó de falsos los rumores esparcidos. Además, aseguró que las labores de respuesta al desastre y la asistencia individual de FEMA son financiadas mediante el Fondo de Ayuda por Desastre, que es una reserva dedicada a labores de este tipo.
El mencionado fondo ha recibido para el año fiscal de 2024 más de 35.000 millones dólares en dotaciones aprobadas por el Congreso de Estados Unidos. La última asignación que recibió la FEMA fue de 20.000 millones de dólares, tal y como ya informó EFE.
Con estos recursos, los afectados por desastres pueden recibir desde 750 dólares casi inmediatos para necesidades graves originadas por la catástrofe o formas adicionales de asistencia para otros requerimientos, como apoyo para vivienda temporal, bienes personales y costos de reparación de domicilio.
Declaraciones malinterpretadas
Por otra parte, recientemente el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, aseguró que con la dotación actual, la FEMA estaba cubriendo “las necesidades inmediatas” del huracán Helene, no obstante, sostuvo que ante la previsión de más ciclones, la agencia no tenía “los fondos para terminar la temporada”.
Algunos perfiles aprovecharon estas palabras para respaldar afirmaciones engañosas sobre el desvío de fondos. Sin embargo, la realidad es que los presupuestos pueden ajustarse ante nuevas declaraciones de emergencias.
El fondo para atender a migrantes es distinto
Aunque es cierto que la FEMA administra el programa de Refugio y Servicios que otorga subvenciones a gobiernos locales y organizaciones sin ánimo de lucro para atender a inmigrantes, las partidas de financiamiento aprobadas por el Congreso son totalmente distintas.
Tal y como consta en internet, este programa contó en 2023 con un financiamiento de 360 millones de dólares, que el Congreso aumentó hasta los 650 millones para el año 2024. No hay ninguna prueba de que esos fondos se hayan desviado.
De hecho, la ley federal, que rige a agencias como la FEMA, prohíbe explícitamente que estos organismos reasignen fondos a competencias que no son las suyas.
Es decir, solo se pueden gastar la cantidad proyectada por el Congreso y exclusivamente en las actividades establecidas. De lo contrario, los funcionarios involucrados podrían recibir penas como suspensión o destitución del cargo, o incluso multas y prisión.
En conclusión, es falso que la FEMA esté destinando fondos de desastres para cubrir ayudas a migrantes. La agencia lo desmiente y estas dotaciones, que son distintas, las elige el Congreso.