Analistas en Norte de Santander se pronuncian frente a la Reforma Laboral
Desde el departamento fronterizo dan a conocer los pro y contra que tiene esta apuesta del actual gobierno nacional.
Cúcuta
Sergio Jiménez es el Director del Observatorio Socioeconómico Regional de la Frontera de la Universidad de Pamplona y desde su experiencia entregó una lectura de los pro y los contra que tiene la Reforma Laboral para los trabajadores y empleadores en Colombia.
En primer lugar asegura que esta Reforma se debe analizar desde lo colectivo y lo individual, así como desde los empleadores como desde los trabajadores.
“Desde el punto de vista del empleado, diría que amplía y profundiza los derechos de los trabajadores individuales como colectivos. En cuanto a derechos individuales profundiza temas de licencia, aparte de la calamidad doméstica que ya existía, profundiza temas de licencias para ir a una cita médica, para ir al entierro de un compañero, para ir a acompañar a los hijos al colegio o alguna actividad educativa que eso no existía. Desde ese punto de vista compagina con la vida familiar. Sin embargo, ahora veámoslo desde el punto de vista del empresario, podría no ser muy beneficioso para ellos estar dando licencias a sus trabajadores” dijo Jiménez.
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Resaltó puntos a favor como por ejemplo “que a partir de las siete de la noche ya se comenzará a contar como horario nocturno, entonces ahí tendría un recargo nocturno que no se tiene actualmente. También los dominicales y festivos va a haber un cambio fuerte porque fue aprobado un 100% adicional en las horas dominicales y festivas”.
Analizando esta reforma desde el ámbito colectivo, indicó que “por ejemplo, la indemnización de despido sin justa causa cambió drásticamente. Según los analistas, para un trabajador entre uno y cinco años en la empresa no se verá tanto el cambio. Sin embargo, para uno que ya lleve más de cinco años podría volverse mucho mayor la indemnización que tendría que dar un empleador”.
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Frente al incentivo en el mercado laboral de esta reforma Jiménez considera que podría causar algún deterioro “desde el punto de vista de nuevas contrataciones”. Indicó que “el empleador, gerente o dueño de una empresa no se va a ver estimulado a contratar a nuevas personas sabiendo toda la legislación que tiene en su contra y a favor del empleado. Entonces esto en el largo plazo, como lo dicen desde la Andi, hace más conflictiva a las relaciones laborales”.
Argumenta que esto podría incrementar la informalidad. “Eso que hemos venido ganando en formalización laboral podríamos frenarlo en casos donde los gerentes o empresarios dejarían de contratar formalmente por tanto beneficio que habría para el empleador y quizás se pueda estar yendo por el lado de contratar a las personas de manera informal”.