De nuevo, las disidencias atacaron a la Fuerza Pública en el Cauca

Continúa la violencia en el Cauca. En dos municipios, las disidencias de las Farc atacaron a la Fuerza Pública, dejando a la población en medio de las confrontaciones.

Una de las situaciones tuvo lugar en el perímetro urbano del municipio de Silvia, donde hombres armados, al parecer, integrantes de la estructura Dagoberto Ramos, dispararon contra la estación de Policía mientras los habitantes hacían compras en pleno día de mercado. Esas confrontaciones armadas escalaron hasta los sectores de Cruces y Las Cruces en el sector rural de la localidad.

Al respecto, el Consejo Territorial de Autoridades Indígenas del Oriente Caucano, Cotaindoc, afirmó que “La población de estos sectores es sometida a hostigamientos de un grupo ilegal armado”. La organización recomendó a los habitantes evitar los desplazamientos por esas zonas, ante la posibilidad de presencia de artefactos explosivos.

Entre tanto, el Observatorio de Derechos Humanos del Cric denunció que miembros de la población civil del pueblo Quisgó quedaron retenidos ilegalmente en el sector conocido como Las Cruces.

Posterior a los combates, retornó la normalidad.

El consejero mayor del Cric, Yedid Conda, afirmó que estas acciones ponen en riesgo a la población civil e incrementan la violencia que afecta a las comunidades indígenas.

En el norte del Cauca, también la estructura Dagoberto Ramos Ramos atacó a las tropas del Ejército en las zonas del Asomadero y Tacueyó. La intensidad de los combates obligó a la suspensión de una actividad religiosa y generó el confinamiento de varias familias.

Además de rechazar los hechos violentos, el Cric reiteró el llamado al respeto a los derechos humanos y al estricto cumplimiento del Derecho Internacional Humanitario, y exigió al Gobierno que tome medidas efectivas para frenar la ola de violencia.

Las autoridades reportaron que no se registraron víctimas ni heridos.