En diálogo con La W, el neurocirujano y académico Eben Alexander, compartió detalles sobre la experiencia que vivió en noviembre de 2008 cuando cayó en coma y, según ha asegurado, pudo ver el Cielo.

Esta experiencia sucedió cuando Alexander entró en coma debido a una rara y misteriosa meningoencefalitis bacteriana de causa desconocida. Después de permanecer una semana en estado comatoso y conectado a un ventilador, comenzó a despertar sorpresivamente a pesar de que sus perspectivas de supervivencia disminuían con el paso de los días.

Tras recuperarse de este episodio, Alexander ha asegurado que la experiencia alteró todo su sistema de creencias que estaba basado en una visión materialista del mundo –bajo la creencia de que el mundo físico es todo lo que existe–. Incluso, su caso médico fue validado por el Journal of Nervous and Mental Disease (Revista de Enfermedades Nerviosas y Mentales).

En La W, Alexander sostuvo que tuvo una misteriosa meningoencefalitis bacteriana, por lo cual su cerebro no funcionaba correctamente ni tenía la posibilidad de tener sueños o alucinaciones.

“La visión que tuve mientras que estaba en coma era muy real, me conecté con una hermana a quien nunca había conocido antes y la vi como una guía espiritual. Me impresionó mucho ese concepto de vida después de la muerte”, aseguró.

Tras el episodio, el neurocirujano aseguró que ha venido estudiando este fenómeno por los últimos 15 años con otros doctores, por lo que han llegado a conclusiones impresionantes que sugieren que la reencarnación puede ser real. “Todo esto está muy bien documentado”, afirmó el médico.

Al ser preguntado sobre si después de este episodio le tiene miedo a la muerte, el doctor Alexander afirmó que se dio cuenta de que al final de la vida no se acaba la conciencia que puede tener una persona: “La muerte es una especie de transición, donde las almas digamos se reconectan con esos seres amados. Es un tipo de reunión de almas”.

“He recibido mucho apoyo de la comunidad científica, sobre todo porque me pude recuperar de la bacteria y fue absolutamente milagroso. Me recuperé dos meses después de despertar”, agregó el neurocientífico.

En cuanto a cómo es el Cielo, el doctor Alexander lo describió así: “Se siente mucho amor y felicidad, la “entrada” son esos seres cercanos que ya partieron al Cielo o a otra dimensión y nos están recibiendo. Todo ese amor y apoyo que damos en vida se puede recibir nuevamente y esa es la gran enseñanza que nos trae toda esta experiencia”.

Escuche la entrevista a Eben Alexander en La W:

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