Venezuela condenó a 581 funcionarios por violar derechos humanos en los últimos 7 años
A juicio de la Fiscalía, ese reporte está diseñado para “alimentar los ataques contra Venezuela”.
Bandera de Venezuela. FOTO: Getty Images / ericsphotography
La Justicia de Venezuela condenó a 581 funcionarios en los últimos siete años por “violar derechos humanos” en el país, según datos ofrecidos este martes por el fiscal general, Tarek William Saab.
Además, la Justicia sentenció a 63 colaboradores de estos funcionarios entre agosto de 2017 -desde cuando el funcionario suele hacer los balances a propósito de su llegada al Ministerio Público (MP, Fiscalía)- hasta agosto de este año, para un total de “644 sujetos condenados en los últimos siete años por violar derechos humanos en Venezuela”.
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Por otra parte, indicó que, en ese período, el MP imputó a 2.536 funcionarios de seguridad del Estado por “presuntas vulneraciones a los derechos humanos”, además de 83 particulares señalados como colaboradores.
Saab, cuyas declaraciones fueron transmitidas por el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV), cargó otra vez contra la Misión de Determinación de los Hechos de la ONU para Venezuela, a la que acusó de elaborar informes “piratas”.
El pasado viernes 20 de septiembre, el MP aseguró que los miembros de esa Misión presentaron recientemente información “sesgada”, “incontrastable” y sin “detalles ni evidencias” que “permitan su revisión”, en su último informe.
La Misión, creada por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en 2019, aseguró haber recibido denuncias de torturas, tratos crueles e inhumanos contra personas detenidas en el contexto de las protestas registradas en la nación caribeña contra el resultado oficial de las elecciones del 28 de julio, que dio la victoria a Nicolás Maduro, cuestionada dentro y fuera del país.
Asimismo, reveló que pudo confirmar que en las protestas poselectorales al menos 158 menores de edad fueron detenidos y que algunos de estos sufrían discapacidad y fueron acusados de delitos graves, como terrorismo o incitación al odio, por lo que pidió a la comunidad internacional que no caiga en el cansancio ni normalice lo que está ocurriendo en el país.
A juicio de la Fiscalía, ese reporte está diseñado para “alimentar los ataques contra Venezuela”.