El Fondo para la Reparación de la Unidad para las Víctimas (FRV) realizó este lunes la primera venta masiva de tierras a la Agencia Nacional de Tierras (ANT) de 18.000 hectáreas, que serán claves para la Reforma Agraria.

Este acuerdo permitirá que campesinos y víctimas del paramilitarismo accedan a los predios, contribuyendo a su reparación integral y a la redistribución equitativa de la tierra.

Según estas entidades, el valor de la transacción asciende a los 175.000 millones de pesos, recursos que se destinarán directamente al Fondo para la Reparación.

Lilia Solano, directora de la Unidad para las Víctimas, destacó la importancia de este avance para superar el rezago en la reparación a las víctimas del paramilitarismo. “Heredamos un gran rezago en la reparación a quienes sufrieron el conflicto armado, algo que ha devenido en muchísimo sufrimiento para ellas. Con este paso, esperamos reparar alrededor de 5.000 víctimas reconocidas en las sentencias de Justicia y Paz”, afirmó Solano.

Por su parte, Felipe Harman, director de la Agencia Nacional de Tierras, enfatizó que esta es la primera compra masiva que realiza la ANT al FRV bajo este convenio, lo cual es resultado de la voluntad política de ambas instituciones para superar las barreras que anteriormente impedían su ejecución.

“Hoy le damos resultados concretos al país. El Fondo para la Reparación contiene los predios del proceso de paz de 1998 y las víctimas del paramilitarismo. Esos bienes eran activos ociosos del Estado, y la ANT ha tomado la decisión de comprar un paquete de predios que suma las 18.000 hectáreas, que serán entregadas a campesinos sin tierras. El convenio, además, tiene una capacidad de 130.000 hectáreas más, entonces tiene un gran potencial”, señaló el director de la ANT.

¿Cómo funcionará?

Con un presupuesto asignado de más de 175.000 millones de pesos ($175.940.802.693), este acuerdo tiene una particularidad fundamental: facilitar la entrega de tierras a los campesinos, mediante la adquisición de predios entregados por jefes paramilitares en el marco de la Ley de Justicia y Paz. Además, los recursos generados por estas compras se destinan a la reparación económica de las víctimas del conflicto.

Los principales departamentos en los que se encuentran ubicados los predios para esta adquisición son Antioquia, Córdoba, y Santander. En gran parte, las tierras que pertenecieron a la antigua Casa Castaño, el Bloque Central Bolívar, Bloque Centauros, Bananeros y Metro, entre otros, se pondrán al servicio de las familias campesinas.