¿Cómo sanar una relación rota con los padres? Consecuencias, consejos y más

En muchas ocasiones, las relaciones entre padres e hijos suelen fracturarse por diversas razones, cuando no se mantienen vínculos de confianza, una comunicación fluida y sincera, además de espacios de interacción donde se puedan conocer uno con el otro. Estas figuras tan importantes como los padres se pueden transformar en seres que causen dolor sin estar conscientes de ello.A propósito de esto, Salud y Algo Más conversó con Marta Segrelles, quien es psicóloga y autora del libro ‘ Querida Mamá: Me dueles’, donde desea “curar” heridas de la infancia que continúan presentes en la etapa de la adultez, a causa de una relación fracturada con las madres durante el proceso de crecimiento junto a ellas.Segrelles enfatizó en los efectos que pueden llegar a marcar la vida de una persona que ya ha pasado por las etapas de la infancia y adolescencia y se encuentra en su desarrollo como adulto, pero tiene barreras a nivel personal y emocional por circunstancias pasadas que quedaron marcadas a nivel sentimental.Estas consecuencias se pueden presenciar en actitudes de rechazó , evitar comunicarse con terceras personas sobre temas personales, síntomas de ansiedad en circunstancias específicas, evitar momentos privados con los padres u ocultar su vida actual por temor o rechazo. En muchos casos, las personas pueden llegar a tomar un mecanismo de autoprotección con los padres para alejarse ante problemas o situaciones que le generen un “dolor” a nivel sentimental. La psicóloga explicó que la persona, de manera natural, toma actitudes de rechazo como ignorar a sus padres durante una conversación, evitar temas personales o realizar algún tipo de actividad junto a ellos.Estos serían efectos que se ven reflejados en actividades de la vida cotidiana y que hacen parte del manejo de emociones, la personalidad y la manera de actuar de cada individuo frente a situaciones de estrés o que impliquen el control de una emoción.La psicóloga priorizó como método de mejora absoluta una excelente comunicación donde no solo se escuche si no se entienda, se procese y se aconseje la información que se recibe por parte de la otra persona sin juzgar, rechazar o recriminar , fortaleciendo un vínculo cargado de confianza, el cual se verá reflejada con los cambios de actitud y mejoras en el ámbito emocional.Además, señaló que se deben dar espacios personales donde se conozca y se interactúe con el otro, dándole paso a una relación estrecha entre mamá e hijo, generando las emociones continuas sin reprimir algún sentimiento.