¿Cuál es la diferencia entre una cuenta de ahorros y un CDT?
Es importante que identifique si quiere guardar su dinero, administrar mejor sus ingresos, hacer seguimiento de sus gastos, fijarse metas financieras o hacer varias transacciones al día.
En Colombia, los bancos ofrecen diferentes productos que se ajustan a las necesidades de sus clientes. Por eso, es importante que, al momento de acudir a alguna de estas entidades, usted haya definido sus necesidades para gestionar su dinero.
En primer lugar, es importante que antes de adquirir un producto usted identifique si quiere guardar su dinero, administrar mejor sus ingresos, hacer seguimiento de sus gastos, fijarse metas financieras o hacer varias transacciones al día.
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En Colombia, dos de los productos bancarios más comunes son las cuentas de ahorros y las cuentas corrientes y a pesar de que pueden parecer herramientas similares entre sí, cada una tiene funciones distintas para administrar los fondos en cuanto a su propósito, sus características y sus beneficios.
En cambio, los CDT son otro tipo de producto ofrecido por los bancos para realizar inversiones seguras y de bajo riesgo.
A continuación, le explicamos para qué sirve cada producto y, esencialmente, en qué se diferencian entre sí:
¿Para qué sirven las cuentas de ahorros?
Las cuentas de ahorro están diseñadas, como su nombre lo indica, para que el usuario realice un ahorro a través de ellas y por eso permiten obtener una pequeña rentabilidad por su dinero.
Sin embargo, no permiten utilizar cheques ni tienen cupo de sobregiros.
Por ese motivo, generalmente permiten ahorrar sin cobrar comisiones o establecer vinculaciones.
¿Para qué sirven los CDT?
Según el Banco de la República, el Certificado de Depósito a Término (CDT) es un “instrumento de inversión establecido mediante certificado” que permite al usuario invertir una cantidad de dinero en una entidad financiera por un plazo determinado. Generalmente, este plazo comprende 30, 60, 90, 180 o 360 días.
El emisor también precisa que las tasas de interés para los CDT son “tasas de captación” o “pasivas” –mejor conocidas como Depósito a Término Fijo o DTF– con el propósito de que las instituciones financieras paguen con un monto y un plazo determinado a quienes dejan su dinero en forma de depósito. Dichas tasas son las que determinan el rendimiento del dinero y son fijadas de acuerdo con el monto y plazo que se acuerden.
De esta manera, la DTF fija un promedio ponderado de las tasas efectivas de captación de los CDT a 90 días que los bancos, corporaciones financieras y compañías de financiamiento reconocen a sus clientes. Además, sirve como indicador de referencia del costo del dinero en el tiempo.
¿Qué son las cuentas corrientes?
Las cuentas corrientes, por otra parte, están diseñadas para acceder a diario a los servicios financieros diarios, es decir, las utilizan las personas que deben hacer movimientos de dinero con alta frecuencia.
Además, suelen necesitar una nómina o pensión, así como pagar comisiones o contratar algún producto vinculado tipo seguro. Sin embargo, no conceden ningún tipo de ganancia por manejar el dinero, aunque incluyen el seguro de depósito Fogafín para proteger su dinero.
Adicionalmente, en caso de quedarse sin fondos, las cuentas corrientes permiten que el banco haga un préstamo con una tasa de interés y un plazo de pago previamente definidos.