En diálogo con La W, el <b>ministro del Interior, Juan Fernando Cristo</b>, se pronunció a propósito del rechazo al episodio ocurrido el pasado 24 de agosto en el que tropas de la Novena Brigada del Ejército Nacional tuvieron que <b>evacuar a una niña de nueve años</b> que cayó en un <b>campo minado</b>.Según las autoridades, el artefacto habría sido <b>instalado por las disidencias de las Farc </b>en la vereda Cristo Rey, zona rural de San Vicente del Caguán, en el departamento de Caquetá.Al respecto, el ministro aseguró que, tras el suceso, el Gobierno Nacional se reunió con el gobernador Luis Francisco Ruiz, así como con varios alcaldes y líderes de comunidades.“La <b>situación del Caquetá con las disidencias de las Farc es indignante </b>y el Gobierno rechaza esa situación (…) ya se levantó el cese al fuego bilateral con las <b>disidencias de ‘Iván Mordisco’</b> y todavía se mantiene con la de<b> ‘Calarcá’, que lo estamos analizando</b>”, afirmó el funcionario.Además, recordó que también hay un problema serio relacionado con las <b>amenazas a líderes sociales y a los propios firmantes del acuerdo de paz</b>, quienes se han visto obligados a abandonar el espacio territorial de Miravalle.En ese sentido, el ministro aseguró que esta delicada situación en el sur del país debe afrontarse con una <b>estrategia de seguridad más contundente</b> y, sobre todo, acelerando la<b> implementación del acuerdo de paz</b>: “Todo lo que está sucediendo –el deterioro de la seguridad en Meta, Guaviare y Caquetá– lamentablemente tiene que ver con la forma en que se <b>abandonó la implementación del acuerdo</b> de paz en estos departamentos”.Por eso, insistió en que, mientras en esos territorios no haya un verdadero<b> avance por legalizar las economías ilícitas</b>, no se logrará una situación <b>de seguridad y de paz estable</b>.En cuanto al plan de choque para lograr esa implementación, Cristo aseguró que este se está <b>construyendo con las comunidades</b>, en las regiones y en los territorios.“El Estado colombiano se comprometió, en el año 2016, a <b>transformar integralmente 170 municipios del país</b> que son los llamados municipios PDET (Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial) que es donde históricamente se recicla la violencia en Colombia”, recordó.Por eso, aseguró que se han reunido con las comunidades, líderes sociales, defensores de derechos humanos, líderes ambientales, añcaldes y gobernadores para <b>revisar la implementación del acuerdo</b> y hacer <b>pactos de transformación territorial</b>: “Queremos sumar todos los esfuerzos y hacer unos pactos que definan con toda claridad a la comunidad cuáles son las obras de educación pública necesitamos para sacar a los jóvenes de la violencia”.En cuanto al acuerdo nacional que se busca promover desde el Gobierno Nacional, Cristo aseguró que se está “construyendo un consenso alrededor del<b> fortalecimiento de la autonomía territorial </b>para que podamos apoyar en el Congreso un acto legislativo que permitirá a los departamentos y municipios del país en los próximos 10 años doblar el Sistema General de Participaciones y entregarles <b>más competencias y facultades</b>”.