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Mi vida y la de mis dos hijas está en peligro: Sandra Ortiz, exconsejera para las Regiones

La exconsejera para las Regiones está en el búnker de la Fiscalía para declarar en medio del caso del saqueo a la UNGRD.

Sandra Liliana Ortiz. Foto: Colprensa.

Antes de entrar al búnker de la Fiscalía para cumplir su cita en medio de la investigación por el saqueo a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), la exconsejera para las Regiones Sandra Ortiz entregó algunas declaraciones en las que se desmarcó del caso.

Ortiz, quien acudió al ente acusador junto a su abogado Pedro Enrique Aguilar, aseveró que su vida y la de sus dos hijas “está en peligro”. La razón, dijo, es que “algunos medios” la han “perseguido”, y que “todas las noticias de los últimos días” se han presentado sin pruebas.

Si ustedes tienen pruebas hoy, los que están acá, yo misma se las entrego a la Fiscalía. Vamos y se las entregamos. Pero no sigan haciéndole daño a mi familia”, le dijo la exsenadora del Partido Alianza Verde a medios de comunicación antes de su diligencia. “Mis hijas están en peligro”, insistió.

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Desde las ocho de la mañana, la fiscal Novena Delegada ante la Corte Suprema de Justicia, María Cristina Patiño, escucha a Sandra Ortiz, una exfuncionaria de confianza de Carlos Ramón González, exdirector del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (Dapre).

Ortiz fue hasta el búnker del ente investigador por solicitud de ella misma. Su idea es aclarar su presunta participación en el escándalo del saqueo a la Unidad de Gestión del Riesgo de Desastres, en el que ha resultado salpicada por declaraciones del exsubdirector Sneyder Pinilla.

Pinilla le ha dicho a la Fiscalía, a cambio de un principio de oportunidad, que Sandra fue la “mensajera” designada para entregarle $3.000 millones al expresidente del Senado Iván Name y $1.000 millones al expresidente de la Cámara Andrés Calle. La orden habría llegado de parte de González.

Hasta ahora, la diligencia fue programada para ser un interrogatorio en el que la exfuncionaria tendría la calidad de indiciada, es decir, procesada preliminarmente hasta llegar a una imputación. Sin embargo, el sentido de la cita podría cambiar luego de que la reunión comience.