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Rusia afirmó haber rechazado incursión ucraniana dentro de la frontera de Kursk

Alexéi Smirnov, gobernador interino, acusó una “tentativa de penetración” del ejercito ucraniano en la frontera de Kursk.

Conflicto entre Rusia y Ucrania. I Foto: Getty Images. / Veronaa

Rusia afirmó el martes 6 de agosto haber repelido un intento de incursión del ejército ucraniano en la región fronteriza de Kursk, tras varias operaciones similares reivindicadas en los últimos meses por un grupo de combatientes pro-Kiev.

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El gobernador interino de Kursk, Alexéi Smirnov, también informó en la red social de Telegram que tres civiles murieron durante el día en ataques ucranianos en esta región rusa.

Según él, soldados del ejército ucraniano realizaron “tentativas de penetración” en los distritos de Sudzhan y Korenevski.

“Los soldados del servicio de guardia fronteriza y las fuerzas armadas rusas impidieron el cruce de la frontera”, afirmó en Telegram, calificando la situación de “difícil”.

Consultado por AFP, un portavoz del ejército ucraniano se negó a comentar sobre la situación en la frontera.

Las fuerzas rusas “fracasan en su defensa” de la región de Kursk, aseguró Andri Kovalenko, un funcionario del consejo nacional de seguridad y defensa ucraniano, sin dar más detalles.

Smirnov también reportó el martes 6 de agosto “bombardeos masivos” y ataques de drones ucranianos dirigidos a su región, que causaron al menos tres muertes de civiles y 13 heridos, incluidos cuatro niños.

Varias incursiones de combatientes armados en Rusia han tenido lugar desde el inicio de la ofensiva rusa contra Ucrania en febrero de 2022.

En varias ocasiones estas incursiones fueron reivindicadas por la “Legión Libertad de Rusia” y el “Cuerpo de Voluntarios Rusos”, grupos que se presentan como formados por combatientes rusos pro-Kiev y que Moscú clasifica de “organizaciones terroristas”.

Sus operaciones aumentan la presión sobre las localidades rusas cercanas a Ucrania, sometidas regularmente a bombardeos mortales en represalia por los ataques rusos en el territorio ucraniano.

Las fuerzas rusas afirman haber repelido estas incursiones en cada ocasión, pero algunas de ellas obligaron a Moscú a utilizar su artillería y aviación.