Iván Soto, exalcalde de Barrancas, denunció a veedor supuestamente cercano a ‘Kiko’ Gómez

Iván Mauricio Soto, exalcalde de Barrancas, La Guajira, hasta las elecciones territoriales del año pasado, denunció ante la Fiscalía de Riohacha a Luis Emiro Solano, parte de la veeduría Vigía Municipal, por señalamientos presuntamente falsos que pretendieron “enlodar su honra”. Se trata de un conflicto político por un contrato en la mira de las autoridades.

Soto firmó un contrato de más de $20.363 millones para construir doscientas viviendas de interés social en el municipio que gobernaba. Sin embargo, hasta mayo de 2024 solo una de las casas estaba en pie. Solano ha denunciado el presunto incumplimiento, además de otras irregularidades, en medios de comunicación y entes de control.

Por ejemplo, el 6 de mayo Solano aseguró en el programa Sigue La W que el convenio había sido asignado a dedo y que la única vivienda fue construida irregularmente en un predio que pertenece a una familiar del actual mandatario de Barrancas, Vicente Berardinelli. Según el exalcalde Soto, se trata de acusaciones falsas con fines políticos.

El exgobernante denunció al veedor a través de la firma del abogado Víctor Mosquera Marín. De acuerdo con su investigación, el veedor “ocultó a los medios de comunicación y entes de control que es una de las personas más cercanas, aliadas y con liderazgo dentro de la organización política del condenado ‘Kiko’ Gómez”, rival político del exalcalde.

La defensa de Soto le entregó a la Fiscalía varias pruebas para tener en cuenta la cercanía de Soto con el clan del exgobernador condenado por varios homicidios en La Guajira, como fotografías del ahora denunciado con Juana Gómez, hija de ‘Kiko’ y excandidata a la Alcaldía en 2023, y Fernando Gómez, excandidato al Senado en 2018.

Para la firma de Mosquera Marín, Solano incurrió en “calumnias” que “tienen propósito de desprestigio por razones políticas”. Además, la bancada de defensa aseguró que las denuncias por el contrato de viviendas de interés social son “falsas, tendenciosas y alejadas de la realidad”, puesto que se trata de un proyecto que sigue ejecutándose.

“Dicho contrato aún está en ejecución”, apuntó el equipo jurídico, que reiteró la promesa de entregar doscientas casas para aproximadamente 740 personas agrupadas en varias familias en condición de vulnerabilidad. Según insistió, incluso los entes de control “han constatado”, a través de visitas, que la iniciativa “se encuentra en plena ejecución”.

La disputa judicial se suma a la rivalidad entre el grupo político del Partido Conservador de la excongresista María Cristina ‘Tina’ Soto, actualmente investigada por fraude electoral, y el del exgobernador ‘Kiko’ Gómez, cuya familia marcó una hegemonía en Barrancas. La elección de Iván Soto rompió la tendencia de escoger a alguien de los Gómez.

Iván es sobrino de ‘Tina’ y primo del representante a la Cámara Juan Loreto. El actual mandatario barranqueño hace parte del mismo sector conservador que llevó a la elección de su antecesor. Actualmente, la Alcaldía de Barrancas de Soto permanece bajo la vigilancia de la Procuraduría, que en junio comenzó una indagación por el contrato de las viviendas.

Según la defensa del exalcalde, las autoridades de control han constatado que “los pagos efectuados con los recursos asignados para el proyecto se han realizado de acuerdo con lo estipulado en los contratos y dentro de los plazos acordados”, lo que implicaría que en realidad no hay ninguna irregularidad en la construcción de las casas.