Los Alpes Franceses serán sede de los Juegos de Invierno de 2030 con algunas condiciones

La asamblea del Comité Olímpico Internacional (COI), reunida en París, aprobó este miércoles 24 de julio conceder la organización de los Juegos de Invierno del año 2030 a la región de los Alpes Franceses, aunque “de forma condicionada” porque faltan garantías que solo estarán disponibles cuando se forme nuevo gobierno en Francia.

La candidatura gala ya había recibido en junio el visto bueno de la Ejecutiva olímpica, que a su vez había aceptado la recomendación de su Comisión de Futuras Sedes, pero el voto de la asamblea era obligatorio para cerrar la adjudicación. La aprobación fue por amplia mayoría: 84 miembros del COI votaron a favor y solo cuatro en contra.

El presidente de la República, Emmanuel Macron, encabezó la delegación francesa que defendió ante el COI las bondades del proyecto, en el Palacio de Congresos de la capital.

“Será una oportunidad única de avanzar en la agenda que ya hemos seguido para 2024. Lo mismo que en el espíritu de innovación”, dijo Macron.

Puesto que la concesión de los Juegos queda supeditada a que el próximo Gobierno francés apruebe una serie de garantías, el presidente aseguró que el próximo primer ministro las ofrecerá y habló asimismo de una futura ley olímpica para impulsar estos Juegos.

En concreto, falta una garantía de realización de los Juegos por parte del Gobierno francés y la confirmación de una contribución pública al presupuesto de organización por parte de las regiones de Auvernia-Ródano-Alpes y Provenza-Alpes-Costa Azul y del propio Gobierno.

El nuevo primer ministro debe firmar las garantías antes de octubre y el Parlamento aprobarlas antes de marzo de 2025.

“Creemos en el futuro de los Juegos de Invierno, creemos en el futuro de nuestras montañas”, aseguró Macron, que recordó las inversiones hechas en los últimos años tanto en los Alpes como en los Pirineos.

Para el presidente, los Juegos de 2030 serán “una oportunidad única de acelerar la agenda” y hacer unos Juegos sostenibles para las regiones y los habitantes de las montañas.

“Quiero confirmar mi pleno compromiso y el de la nación francesa”, afirmó Macron.

“Estamos todos unidos para hacer de esta candidatura un proyecto de éxito. Hemos cumplido con París y haremos lo mismo (en 2030) A tiempo, en presupuesto. Por el futuro de nuestras montañas, por el futuro del olimpismo. Pueden confiar en nosotros”, aseguró.

David Lapparpient, presidente del comité olímpico galo, habló del cambio climático como una realidad innegable a la que deberán hacer frente al pensar en los Juegos.

“Tenemos una sólida red de transportes en todos lo Alpes, las instalaciones de los Juegos de Albertville, la experiencia de organizar numerosas competiciones y la mayor zona de esquí del mundo. Tenemos nieve, nieve de verdad”, afirmó.

Los últimos Juegos de Invierno, los de Pekín 2022, se disputaron enteramente sobre nieve artificial.

Será la cuarta vez que Francia organice unos Juegos de invierno, tras Chamonix en 1924, Grenoble en 1968 y Albertville en 1992, y la séptima que albergue una cita olímpica, ya que París fue sede de los de verano en 1900 y en 1924 antes de los que inaugurará este viernes 26 de julio.

Las diferentes pruebas de los Juegos de 2030 se repartirán en cuatro sectores: Alta Saboya, Saboya, la zona de Briançon y las montañas de Niza.

Los Juegos utilizarán algunas de las más conocidas estaciones de invierno del país, como Courchevel, Méribel, ambas sede de los últimos Mundiales de esquí, Val d’Isère, Le Grand Bornand, La Clusaz, Serre-Chevalier o Montgenèvre.

La región de Niza albergará las pruebas de patinaje, como el hockey o el patinaje artístico.

La asamblea olímpica elegirá también este miércoles 24 de julio la sede de los Juegos de Invierno de 2034, con la estadounidense Salt Lake City como única aspirante.