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¿Qué es un contrato de aprendizaje en el SENA? Este sería el salario por contratación

¿Lo sabía? Conozca los parámetros que rigen el contrato de aprendizaje y cuánto deben pagarle en caso de tener uno.

Aprendiz SENA | Foto: GettyImages

El Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA), asegura que un contrato de aprendizaje es el acuerdo que sus aprendices hacen con la empresa donde van a ejercer sus prácticas profesionales, recibiendo educación práctica y comprendiendo como se maneja el mundo laboral en el área que eligieron.

La duración de los contratos de aprendizaje es fija y está estipulada en la Ley 789 de 2002 y el Decreto 933 de 2003, periodo de tiempo en el que el aprendiz podrá poner en práctica sus conocimientos.

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¿Cuáles son los beneficios de un contrato de aprendizaje?

  • Formación: ofreciendo a los aprendices adquirir conocimientos en un ambiente laboral real.
  • Experiencia laboral: ya que el tiempo que permanezcan en las empresas les servirá como experiencia laboral en su hoja de vida.
  • Ingreso económico: si bien un aprendiz no cuenta con la posibilidad de ganar un salario mínimo, este sí deberá recibir por ley el 75% del salario en su fase práctica, es decir, $975.000 para cubrir sus gastos personales, según la ley previamente mencionada.

Es importante destacar que cada empresa cuenta con sus parámetros a la hora de pagar a sus practicantes, de allí que algunas lleguen a pagar el salario mínimo completo, así como hay otras que no entregan ningún tipo de beneficio.

¿Qué beneficios tiene la reforma laboral para los aprendices SENA?

Uno de los más destacados puntos ya aprobados por el Congreso en la reforma laboral es el relacionado con el contrato de aprendizaje de los estudiantes del SENA, pues mejoraría las condiciones laborales de estos, beneficiando a más de 440.000 jóvenes en todo el país.

Esta tiene que ver con formalizar el contrato que firman los aprendices y convertirlo en un contrato laboral a término fijo, pues, aunque hay empresas que le pagan el salario mínimo a los estudiantes, la mayoría no lo hacen.

Esta iniciativa, impulsada por la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, obligaría a todas las empresas de Colombia a pagarle a sus practicantes SENA un salario mínimo, además de cumplir con las prestaciones sociales como salud y pensión.

“Hoy el gran paso que se da es que no solo se reconoce el trabajo de los aprendices del SENA, sino que también se habla de la monetización, es decir, que las empresas contraten a estos estudiantes, que no solamente fortalecen sus procesos productivos, sino que además fortalecen a la sociedad en el aumento de competencias que tienen para tal fin”, aseguró la ministra.