Tres fallecidos y 13 heridos dejó explosión en la Avenida del Río en Pereira

Pereira

En la mañana del 11 de junio, los habitantes del sector Avenida del Río con calle 16 vivieron momentos de angustia y desesperación, pues el estridente ruido de tres explosiones consecutivas, seguidas por gritos de auxilio, despertaron a todos los vecinos del barrio.

El último reporte entregado por el gerente del Hospital Universitario San Jorge de Pereira, Javier Alejandro Gaviria, da cuenta del fallecimiento de tres personas en el centro asistencial. Santiago Emilio Silva, de 54 años de edad, con 90 % de quemaduras en su cuerpo, Maria Irsila Tazcón Medina, de 82 años, con 80 % de heridas en su piel, y Adriana del Socorro Hoyos, de 61 años, con el 85 % de su cuerpo quemado, los tres con lesiones severas en sus vías aéreas, a causa de la explosión por gas.

Gaviria reportó que recibieron un total de 12 heridos, siete de estos mujeres y cinco hombres, de los cuales dos, una mujer de 30 años de edad y la que sería su hija de 9 años, eran las más críticas, tras sufrir quemaduras en el 90 % de su cuerpo.

Nueve de los heridos aún se encuentran en la Unidad de Cuidados Intensivos, y desde el centro médico, en horas de la noche, se gestionaba la remisión de uno de ellos a la Unidad de Quemados del Hospital Simón Bolívar en Bogotá.

Juan Camilo Ballesteros, director del Cuerpo Oficial de Bomberos Pereira, relató los hechos acontecidos en esta nueva emergencia que habría tenido lugar por una presunta falla humana al manipular un tanque estacionario de gas propano.

Durante la tragedia resultaron afectados un canino y un conejo por las llamas, ambos fueron trasladados al Bioparque Ukumarí, para recibir atención.

Mauricio Salazar, alcalde de Pereira, manifestó que ha solicitado a la Fiscalía Seccional Risaralda, investigar la emergencia y determinar la responsabilidad del propietario del vehículo y del GLP, mientras se establece lo necesario para la reubicación de las familias damnificadas.

Las primeras indagaciones conducen a que los cilindros serían cargados en la cama baja que tenían como destino la ciudad de Ibagué, sin embargo, se desconoce el objetivo por el que el vehículo se encontraba en la zona residencial.