Demandan elección de José Ismael Peña como rector de la UNAL: estos son los argumentos

La Universidad Nacional (UN) atraviesa un periodo de crisis desatada por la elección de un nuevo rector, pues en los últimos días ha vivido jornadas de protestas violentas y su funcionamiento se encuentra paralizado.

Todo comenzó el pasado 21 de marzo cuando José Ismael Peña fue elegido rector por el Consejo Superior Universitario (CSU) para el periodo 2024-2027 en reemplazo de Dolly Montoya. Esta decisión fue rechazada por estudiantes y por el Gobierno, al considerar que el procedimiento de elección no se realizó conforme a los estatutos vigentes de la UN.

No obstante, a pesar de las críticas, Peña acudió a una notaría el pasado 2 de mayo y se posesionó como nuevo rector, a pesar de que el documento no contó con la firma de la ministra de Educación, Aurora Vergara Figueroa, que hace parte del CSU.

Así mismo, la Procuraduría General de la Nación advirtió que la elección del rector de la Universidad “está amparada bajo normas del Consejo Superior Universitario”.

Frente a estos hechos, el excandidato a rector Leopoldo Múnera y los abogados Alberto Yepes y Rodrigo Uprimny presentaron una demanda de nulidad al nombramiento del rector de la Universidad Nacional.

En diálogo con La W, el abogado Uprimny explicó que el problema de la Universidad Nacional tiene un componente fundamental: “Un problema de ilegitimidad en la designación del rector José Ismael Peña por no haber respetado la consulta ampliamente ganada por el profesor Múnera”.

Sin embargo, Uprimny precisó que ese no es el fundamento esencial de la demanda, sino que este recae sobre “los problemas de legalidad de la decisión tomada por el Consejo Superior”.

“La elección de rector tiene dos fases, una de ellas es la consulta a la comunidad académica que no es estrictamente vinculante, pero determina una lista de cinco candidatos de los cuales el Consejo Superior (integrado por ocho consejeros) escoge (…) el Consejo Superior debe tomar en serio esa consulta y si no va a elegir al más importante, debe dar las explicaciones y justificaciones”, explicó.

De este modo, agregó el abogado Uprimny, en la reunión del Consejo Superior para elegir rector se modificaron las reglas: “Se cambió la forma de designación bajo el argumento de que una norma dice que el Consejo Superior puede adoptar una metodología para designar el rector, pero no se trata de modificar las reglas de decisión establecidas en el Estatuto de la Universidad Nacional y en el reglamento de funcionamiento del Consejo”.

Dicha metodología nueva, según Uprimny, tiene varios componentes: “Se adoptó voto por amenazas que habían recibido algunos consejeros. Nosotros hemos sostenido que esas amenazas deben ser investigadas y los consejeros protegidos, pero en una universidad que se funda en la transparencia, ese tránsito al voto secreto es muy problemático”.

El segundo componente fue que se adoptó un método de votación llamado ‘El Método Borda’, en el cual no se vota de forma directa por cada candidato, sino que se ordena a los preferentes: “Si hay cinco candidatos, cada consejero dice cuál es el que le parece mejor y ese tiene cinco puntos, cuál le parece el segundo mejor y ese tiene cuatro puntos, y así sucesivamente”.

Para Uprimny, esta modificación de las reglas de decisión profunda permitió manipular la elección:

“Son ocho consejeros y tres de ellos habían anunciado públicamente que iban a respetar la consulta porque, además, consideraban que el profesor Múnera tiene una gran trayectoria académica (…) modificaron las reglas de decisión cinco consejeros que se reunieron unos días antes en la casa del exrector Mantilla y propusieron estas reglas de decisión: voto secreto y Método Borda para eliminar candidatos en las dos primeras rondas”.