Internacional

Equipo legal de Daniel Sancho en España respetó que el juicio se celebre a puerta cerrada

El juez del caso ha ordenado en la primera jornada del juicio que no se informe de nada de lo que pase dentro de la sala en la que se celebra, lo que podría ser penado con la cárcel, y ha prohibido el acceso a los periodistas.

Daniel Sancho, acusado del asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta. Foto: EFE/SOMKEAT RUKSAMAN / SOMKEAT RUKSAMAN

El equipo legal que ofrece asesoría desde España a Daniel Sancho, quien se enfrenta desde este 9 de abril a un juicio en el que se le acusa del asesinato premeditado del colombiano Edwin Arrieta, afirmó a EFE que respeta la decisión del juez de “mantener el juicio a puerta cerrada”.

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“Tenemos que respetar lo que el juez ha decidido y por nuestra parte así lo haremos. Más allá de informar de qué testigos van a testificar cada día, no vamos a dar ninguna información”, aseguró a EFE desde España Ramón Chipirrás, del despacho criminológico jurídico que junto al bufete Marcos García-Montes asesora a Sancho.

El juez del caso, cuyo nombre es confidencial, ha ordenado en la primera jornada del juicio que no se informe de nada de lo que pase dentro de la sala en la que se celebra, lo que podría ser penado con la cárcel, y ha prohibido el acceso a los periodistas.

“Creo que es una advertencia seria de que, si hay filtraciones, la persona que las ha realizado va a tener algún problema”, añadió Chipirrás.

Según explicó hoy a EFE un portavoz del tribunal central de Tailandia, no existen directrices generales en el país sobre cómo se debe hacer la cobertura de un juicio, y depende del juez si se permite o no la presencia de medios de comunicación, a lo que normalmente sí se da permiso, sin poder grabar imágenes o audio.

Más de una decena de medios de comunicación se desplazaron hasta el tribunal provincial de Samui (isla al sur de Tailandia), donde se celebra el juicio desde hoy y hasta el 3 de mayo, y en la primera sesión declararon testigos de la Fiscalía.

En concreto, una mujer birmana que encontró los primeros restos del cadáver de Arrieta en un vertedero de la isla de Phangan (donde tuvo lugar el supuesto crimen el pasado 2 de agosto) y una tailandesa que alquiló una motocicleta a Sancho el 31 de julio.

Sancho, de 29 años, pudo realizar preguntas a los testigos, según dijo a los medios desde Samui el abogado en España de la familia de Arrieta, Juan Gonzalo Ospina.

Además de Sancho, el padre del joven, el actor español Rodolfo Sancho, también asistió hoy a la vista.

El joven acude representado por el abogado de oficio tailandés Aprichat Srinuel, pues Tailandia solo permite letrados oriundos del país durante el proceso, y la defensa argumentará que la muerte de Arrieta se debió a un accidente durante una pelea.

Por su parte, el fiscal encargado del caso, Jeerawat Sawatdichai, tratará de demostrar que se trató de un asesinato premeditado, y acusa a Sancho de este y otros dos delitos, el de ocultación del cadáver y destrucción de documentación ajena.