En diálogo con La W,<b> David Mencer, portavoz del Gobierno israelí</b>, se refirió a la decisión del Ejército de <b>retirar a todas sus tropas terrestres </b>del sur de la <b>Franja de Gaza</b> el pasado 6 de abril, dejando una sola brigada en el enclave.Esta retirada ocurre después de cuatro meses de combates en la zona de Jan Yunis y cuando se cumplen <b>seis meses del comienzo de la guerra</b> entre Israel y Hamás en Gaza, donde <b>ya han muerto más de 33.100 personas</b>, la mayoría mujeres y niños.En la actualidad, <b>solamente queda una brigada israelí </b>en el enclave palestino que se ocupa de asegurar un corredor entre el sur de Israel y la costa gazatí, bloqueando el paso al norte de la Franja y facilitando las <b>operaciones en el centro y norte</b> del territorio.Al respecto, Mencer hizo un <b>balance de los seis meses de campaña militar en Gaza</b>: “Son seis meses desde la terrible masacre del 7 de octubre de Hamás y sus cómplices, pero también son seis meses desde el progreso que hemos adelantado para destruir a este grupo islamista y que se libere a los secuestrados”.En esa línea, sobre la situación de los <b>más de 150 secuestrados </b>que siguen en poder de Hamás, entre quienes se encuentran mujeres y niños, el portavoz aseguró que su país tiene dos maneras para liberarlos: “El plan incluye, uno, la <b>presión militar al atacar a Hamás</b> –no a la gente de Gaza– y dos, las <b>negociaciones</b>”.“<b>Nadie quiere esta guerra, nosotros no la pedimos</b>, fuimos forzados a pelear. Desafortunadamente, Hamás está operando en áreas donde se encuentran civiles, mezquitas, escuelas, lugares de maternidad, hospitales e incluso casas de civiles. Ellos esconden sus armas bajo las camas de los niños (…) mi sobrino, quien está en esta guerra, no encontró el póster de una superestrella en el cuarto de un niño, sino el de Adolfo Hitler. Eso demuestra contra quién estamos peleando”, afirmó.En ese sentido, insistió en que<b> Israel no pretende hacerles daño a los civiles</b> y que, durante esta campaña militar, alrededor de<b> 13.000 terroristas han sido asesinados</b>: “Estamos haciendo todo lo posible para no afectar a los civiles en medio de esta guerra (…) en el futuro, se verá que estamos limitando estas acciones para no afectar más a los civiles. Hamás quiere maximizar las muertes de los civiles”.Sobre por qué ha sido <b>utilizada la comida como arma de guerra</b>, Mencer aseguró que es necesario “<b>lidiar con los hechos y no con la propaganda</b>”, por lo que considera que “el mundo, desafortunadamente, ha caído en esta propaganda por parte de Hamás porque el hambre que hay en la Franja de Gaza es orquestada por ellos”.