Juicio por ‘Papeles de Panamá’ iniciará este lunes y será transmitido en vivo
Este proceso por blanqueo de capitales arrancó a partir de las publicaciones de una investigación periodística internacional que filtró en 2016 detalles sobre transacciones financieras hechas a través de miles de sociedades anónimas extraterritoriales creadas por la firma Mossack Fonseca y vinculadas a personas en 200 países y 21 jurisdicciones financieras.
El juicio por el caso conocido como ‘Papeles de Panamá’, una de las mayores filtraciones de documentos de la historia que vinculó a personalidades de todo el mundo con el blanqueo de capitales a través de la firma panameña Mossack Fonseca, está previsto que comience este lunes 8 de abril tras varias suspensiones y será transmitido en vivo por la Justicia del país centroamericano.
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El Órgano Judicial de Panamá informó de que el Juzgado Segundo Liquidador de Causas Penales del Primer Circuito Judicial de Panamá, a cargo de la jueza Baloisa Marquínez, “designó defensores públicos en caso de la ausencia de algunos abogados técnicos particulares”, una medida que busca impedir una nueva suspensión del inicio del juicio.
“Este juicio por el caso ‘Panama Papers’ será transmitido en vivo a través de la plataforma digital de YouTube del Órgano Judicial, con el fin de garantizar los principios de publicidad, transparencia y acceso a la información”, destacó el organismo, que recordó que la investigación consta de 528 tomos y que surgió a inicios del 2016.
La audiencia “está programada para 27 imputados por la presunta comisión del delito de blanqueo de capitales”, y se desarrollará entre este lunes y el 26 de abril próximo, la fecha alterna estipulada por el tribunal para el juicio, que debió comenzar en el 2021.
Entre los imputados están los abogados Jürgen Mossack y Ramón Fonseca Mora, fundadores del extinto bufete, núcleo del escándalo conocido mundialmente como ‘Papeles de Panamá’.
El bufete, que tenía oficinas en una decena de países, las cerró todas en marzo de 2018 por falta de liquidez y de clientes. Sus fundadores aseguraron en una carta publicada en junio de ese mismo año que su firma vendió más de 250.000 sociedades a lo largo de 40 años y que “nunca estuvo involucrada en actos ilícitos”.
Este proceso por blanqueo de capitales arrancó a partir de las publicaciones de una investigación periodística internacional que filtró en 2016 detalles sobre transacciones financieras hechas a través de miles de sociedades anónimas extraterritoriales creadas por la firma Mossack Fonseca y vinculadas a personas en 200 países y 21 jurisdicciones financieras, de acuerdo con un informe del Ministerio Público (MP, Fiscalía) de Panamá.
Así fue que mediante esquemas societarios y financieros se ocultaron “activos ilícitos y los beneficiarios reales de los mismos, propiciando el blanqueo de miles de millones de dólares”, según este informe.
En Panamá, la investigación por este caso duró hasta septiembre de 2019, cuando en su vista fiscal el Ministerio Público (MP, Fiscalía) solicitó al tribunal de la causa el llamamiento a juicio de 44 personas por blanqueo de capitales, y el sobreseimiento de otras once.
Aunque el inicio de la audiencia preliminar se fijó a más tardar en noviembre de 2020, se instaló un año más tarde y fueron llamados a juicio 32 personas por blanqueo, entre ellos los dos socios fundadores de la firma Mossack Fonseca.
Por la gestión de asistencias internacionales, el inicio del juicio programado para diciembre de 2021 como fecha más tardía se pospuso para inicios del pasado diciembre, pero tampoco se realizó “debido a notificaciones que se tienen que hacer a través de asistencias internacionales”, según informó el Órgano Judicial.
La filtración de los Papeles de Panamá llenó 2,6 terabytes y más de 11,5 millones de documentos del bufete panameño Mossack Fonseca, afectando a más de 140 políticos y altos funcionarios de todo el mundo y superó los 1,7 millones de archivos que el consultor tecnológico y exempleado de la CIA Edward Snowden filtró en 2013.
Panamá sufrió un duro golpe a su reputación por este escándalo, que le valió ser incluida en listas grises de Francia, de la UE y también, por segunda vez, en la del Grupo de Acción Financiera Internacional (Gafi), del que fue excluida en octubre pasado.